"Baraja, el mejor traspaso"

Manolo García Quilón es de los "nuevos" representantes. Sólo lleva futbolistas y entrenadores españoles. Pero su nómina impresiona, en ella están Baraja o Rafa Benítez, por ejemplo.

Pregunta. ¿Porqué se hizo representante?

Respuesta. Fui ojeador del Atlético. Esa relación constante con los jugadores me llevó a comprobar que, con frecuencia, jóvenes que yo pensaba que tenían cualidades, en un porcentaje muy alto, acababan triunfando. Empecé con Vicente Calderón y continué con Jesús Gil. Más tarde Carlos Aguilera me pidió ser su agente. A partir de aquí me desvinculé del Atlético y me dediqué a ser representante de futbolistas nacionales, no extranjeros.

P. ¿ Esto es la selva?

R. La aparición de reglamentación y normativa jurídica para el ejercicio de esta profesión, supone un paso más en la profesionalización y una mayor garantía jurídica tanto para clubes como para jugadores. Todos saben las normas y hay que cumplir las reglas del juego.

P. ¿Tiene delegaciones en países extranjeros?

R. No. Sigo el fútbol internacional por iniciativa propia profesional, pero sólo trabajo con jugadores nacionales.

P. ¿Cuál ha sido su mejor adquisición?; ¿Y su mayor problema?

R. El traspaso de Baraja del Atlético al Valencia que costó 2.000 millones de pesetas, o el de Luis García al Liverpool que fueron 1.500 millones. El caso Mista fue el más complicado porque fue el primer contencioso por el que un jugador se acogió al decreto 1.006, que regula la relación de los deportistas profesionales.

P. ¿Cuál ha sido la reunión más larga que ha tenido para intentar llegar a un acuerdo?; ¿Y el sitio más raro donde ha llevado una negociación?

R. La reunión más larga fueron dos días consecutivos sin descanso, bueno hacíamos pequeños recesos. Fue en su día con el Tenerife por el traspaso de Aguilera. Con el Liverpool también estuvimos dos días reunidos en la contratación de Benítez.

P. ¿Hay muchos piratas en la profesión?

R. En todas las profesiones hay ejercientes de acuerdo con la reglamentación y algunos fuera de ella. No es que sea exclusivo de la profesión de agentes el no estar reglamentado, porque hay otras profesiones donde hay personas que no cumplen con la reglamentación. Me parece que todo el mundo debe cumplir con la reglamentación pero no soy el que fiscaliza el cumplimiento de las normas.

P. Como en la película Jerry Mcwire ¿Cree que el trato con sus representados es personalizado?

R. Hay una relación de confianza total en mis jugadores hasta el punto de que para mí la palabra de ellos es un contrato, sin que necesite poder escrito, ni documento, para yo tener plena confianza en la relación profesional que mantengo con ellos. Cada profesional te va marcando un guión del trato que él prefiere con su comportamiento diario. Algunos son personas más independientes que sólo quieren un asesoramiento profesional.

P. ¿Cuántos representados tiene?

R. Unos 40 jugadores de fútbol y seis entrenadores

P. ¿Qué cifras aproximadas manejan al año?

R. Entre 18 y 36 millones de euros en un año en traspasos.