Rincón calienta motores

Con un toro como el primero de Jandilla, gran toro por cierto, es fácil pagar la falta de rodaje de principios de temporada. César Rincón lo pagó en parte. La faena de Rincón a ese toro dentro de tres meses, por ejemplo, hubiera sido otra cosa. Regordío y corto, el de Jandilla peleó estiloso en varas. Le pegaron. Un galope tremendo, de bueno, destapó sin reservas su calidad. Gran toro al que Rincón toreó mejor con la derecha. Puesto al natural le faltó seguridad a Rincón, que se dejó tropezar la tela. Faena muy reconocida por la gente. Y también algo condicionada por el viento.

Ya no hubo otro toro de tanto nivel en la muy toreable corrida de Jandilla. Pero saltó un quinto con nobleza y calidad, que se apagó algo en el tramo final de una labor calmosa, centradita, pero de poco compromiso de El Fandi. Mucho antes se le acabó la luz al segundo. El tercio de banderillas y un trincherazo a destiempo y sin sentido acabó con él. De El Fandi se recuerda, sobre todo y ante todo, dos tercios de banderillas seguros, contundentes y muy reunidos. Un derroche de facultades de El Fandi.

Buenas las hechuras del cuarto. Noble toro pero también muy flojo. Rincón dominó la situación. Mas la faena, de empeño y honesta, se deslizó sin continuidad. Como algo descuartizada.

También flojo el tercero, no dejó que Tejela puntuara. Hubo actitud pero no contenido. En el sexto, tan mansito como muy toreable, Tejela no logró equilibrar una labor que se antojó anodina y vulgar.