_
_
_
_

El Ayuntamiento de Zaragoza cierra el ballet de la ciudad

La desaparición del conjunto está prevista para finales de junio

Tras 22 años de andadura, el Ballet de Zaragoza, el único ballet municipal de España, desaparecerá el próximo 30 de junio. El Ayuntamiento de la ciudad, donde gobiernan PSOE y Chunta, adoptó esta decisión ante el elevado coste que supone mantener la compañía y destinará su presupuesto a "promover actuaciones de otras compañías de la ciudad". "No queremos ahorrar, queremos distribuir mejor los fondos", afirman.

"Hasta ahora no había manera de traer grandes compañías a Zaragoza porque todo se lo llevaba el ballet. Ahora será posible", comenta la teniente de alcalde de Cultura, Rosa Borraz. Otra de las decisiones que se han tomado es que la compañía de Miguel Ángel Berna -que actuó en París el pasado 16 de diciembre cuando la ciudad ganó la Expo de 2008 y que ha sido la imagen de la danza de Zaragoza en este acontecimiento- sea la residente del teatro Principal, el teatro del Ayuntamiento.

Los 26 bailarines del Ballet de Zaragoza tienen ante sí un incierto futuro. Sólo los seis que tenían contrato fijo saben que se les recolocará. La compañía tenía previstas actuaciones en Stuttgart y Estambul, una gira por China y un estreno en primavera, pero todo ha quedado en suspenso. "Vamos a recoger firmas, están llegando algunos apoyos, pero no sé qué va a pasar", comenta Mariola Gimeno, que lleva 14 años en el Ballet. "Nos han dado la espalda. Incluso los sindicatos".

Lo que nadie entiende es que sea un gobierno de izquierdas quien haya decidido liquidar el ballet. La actual directora, Patsy Kuppe-Matt, considera que "el horizonte está oscuro". Llegó de Liubliana como maestra de baile y considera que "se han hecho las cosas mal, nos ha faltado promoción y que hayan creído en nosotros. Es difícil salir adelante sin el apoyo de quienes te sustentan".

La decisión es firme. Acaba una etapa y el cerrojazo lo dan los mismos que crearon el ballet en 1982 de la mano de María de Ávila. Michel Zarzuela, director del área de Cultura del Ayuntamiento, asegura que el argumento económico no ha sido el decisivo. "Lo ha mantenido el Ayuntamiento sin ninguna ayuda. El ballet tenía un presupuesto de un millón y medio de euros y sólo recaudaba 120.000. Pero no ha sido eso lo que ha precipitado la decisión, sino el modelo, que estaba herido de muerte". Zarzuela promete que habrá apoyos para otras compañías de la ciudad -hay cuatro de danza clásica en Zaragoza-, que habrá ayudas, y en el futuro no se descarta llegar a acuerdos con alguna de ellas. "Como se intentó en los noventa con Víctor Ullate", dice.

El director del área de Cultura habla de un centro de ayuda a la danza en una ciudad que ha dado, y sigue dando, primeras figuras en los ballets de todo el mundo, como Trinidad García Sevillano, Antonio Castilla, Ana Laguna, Amaya Iglesias, Víctor Ullate o Gonzalo García Portero. "El modelo no servía. Anquilosado, lento administrativamente. Ha sido una agonía de años".

Cambiar el modelo

El ballet, que nació de la mano de María de Ávila, ha tenido como directores a Cristina Miñana, Mauro Galindo, Arantxa Argüelles, Harold King y Patsy Kuppe. Arantxa Argüelles, directora entre 1977 y 1999, dice que era una muerte anunciada. "Había que cambiar el modelo. Pero no se puede cambiar sin un buen director y no se puede tener un buen director sin cambiar el modelo, y faltaban muchas cosas". Argüelles se duele que el final sea el cierre. Sobre todo porque no ve que la alternativa, una compañía de fusión, sea la acertada.

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_