El mapa de guarderías públicas revela graves carencias en el área metropolitana

El mapa de guarderías elaborado por el Departamento de Educación revela la penosa situación de municipios del área metropolitana de Barcelona. Es el caso de Viladecans, que no posee ni una sola plaza pública, o el de Badalona, que sólo puede ofrecer 173 para sus casi 215.000 habitantes. La consejera Marta Cid reconoció ayer que las 30.000 nuevas plazas que se construirán hasta 2008 "no cierran el capítulo" de la demanda. La construcción de estas guarderías, que duplicará la oferta actual, es fruto de una petición de la ciudadanía a través de una iniciativa legislativa popular.

La consejera Cid, el presidente de la Federación de Municipios de Cataluña, Manuel Bustos, y el presidente de la Asociación Catalana de Municipios y Comarcas, Joan Roig, firmaron ayer un convenio para duplicar la oferta de guarderías públicas en cuatro años y acordaron su distribución por el territorio.

El compromiso deriva de una iniciativa legistativa popular (ILP) que arrancó en 2002 con la entrega de más de 100.000 firmas para forzar al Gobierno catalán a dar respuesta a la demanda social y construir más guarderías. Otro de los mandatos de la ILP era elaborar un mapa de guarderías. El análisis revela que las comarcas del Barcelonès, el Maresme y el Vallès Occidental y el Oriental ofrecen escasas plazas públicas. Así, en poblaciones como Santa Coloma de Gramenet, Mollet o Cerdanyola, el número de plazas públicas no supera el 5% de la población de 0 a 3 años. Además, se dan casos de municipios como Viladecans, Ripollet o El Masnou en los que todas las guarderías son privadas.

Mayor escolarización

En la actualidad, en Cataluña hay 29.381 plazas públicas, lo que representa el 44% de la oferta total de guarderías, ya que el resto está en manos privadas. El conjunto de guarderías que funcionan a fecha de hoy escolarizan al 33% de la población de 0 a 3 años, y con el acuerdo firmado ayer se pretende llegar al 60%. A través de este convenio, Educación se compromete a conceder ayudas a las administraciones locales de hasta 5.000 euros por cada nueva plaza y 1.800 para su mantenimiento. No obstante, dado que la construcción de nuevas guarderías en los grandes municipios es más costosa, el convenio incluye una cláusula que especifica que estas subvenciones podrán aumentar. El 60% de las 30.000 nuevas plazas se ubicarán en la provincia de Barcelona (unas 18.000), mientras que en Tarragona se crearán unas 4.800, en Girona cerca de 3.000, y en Lleida unas 4.800. Irene Rigau, diputada de CiU, lamentó ayer que el análisis del mapa de guarderías no incluya un estudio de la potencial demanda. Rigau advirtió también de que la nueva oferta de plazas no alcanzará a cubrir las necesidades, debido al importante aumento de la población de menores de tres años, que ha pasado de 159.345 en el año 2000 a 198.101 en 2003.