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Las diputaciones avisan contra la creación de nuevas administraciones

Los presidentes provinciales aceptan con matices la futura división en veguerías

Los presidentes de las cuatro diputaciones provinciales catalanas aprobaron ayer en la Seu d'Urgell (Alt Urgell) una declaración conjunta en la que piden a la Generalitat que la futura división territorial de Cataluña en regiones o veguerías no comporte en ningún caso "la creación de más administraciones" y se muestran dispuestas a adaptarse a la nueva organización.

En un manifiesto de cinco puntos, los presidentes de las diputaciones de Barcelona, Celestino Corbacho; Girona, Carles Páramo; Tarragona, Joan Aregio, y Lleida, Isidre Gavín, reclaman más consenso y una mayor participación de estas instituciones y de los organismos locales en la nueva ordenación territorial de Cataluña, al tiempo que proponen que el proceso de reforma y, especialmente, el de creación de los consejos de veguería o región se haga "a partir de la existencia y la transformación de las actuales diputaciones".

"Esta transformación", señala la declaración de La Seu, "supondrá la adaptación al nuevo mapa territorial, una nueva denominación y la adaptación al nuevo marco competencial aprobado por el Parlament. Se trata de no crear una nueva administración, sino de transformar las existentes". Los cuatro presidentes coinciden en opinar que el proceso de reorganización territorial ha de ser progresivo y hacerse con el máximo rigor para que los actuales servicios que prestan las diputaciones no pierdan calidad y no se aumente el gasto público.

Los presidentes de las corporaciones solicitan a la Generalitat que las diputaciones participen más en el proceso de configuración del modelo territorial y se muestran partidarios de una reforma gradual y de la creación de veguerías siempre que ello no signifique una desatención de los municipios.

Las cuatro diputaciones están dispuestas a adaptarse a la nueva estructura, que prevé su sustitución por siete veguerías, con el objetivo de evitar la duplicidad de administraciones y no generar más gasto. Celestino Corbacho, el único socialista, advirtió de que, si se comete el error de crear nuevas administraciones con el pretexto de vaciar de contenido las actuales, "dentro de 10 años habrá dos administraciones".

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