El PSC afirma que quiere diluir su protagonismo en favor del consenso

El mensaje que los socialistas catalanes quisieron lanzar ayer fue que están dispuestos a renunciar al protagonismo político en aras del consenso, tanto respecto al Estatut como a la financiación, y tanto dentro como fuera de Cataluña. En reunión de la ejecutiva que el PSC celebró ayer ésa fue la línea dibujada por su primer secretario, José Montilla, y seguida a pies juntillas por la presidenta del Grupo Socialista en el Parlament, Manuela de Madre, y el viceprimer secretario y portavoz del partido, Miquel Iceta. Hay que dar más protagonismo a los nacionalistas, pero al tiempo llamar al consenso para que el Estatut y la nueva financiación para Cataluña tengan, si es posible, un respaldo unánime. Eso significa incluir al PP, lo que haría imparable la reforma estatutaria en Madrid.

Montilla, en declaraciones a TV-3, destacó el "esfuerzo decisivo" del PSC por conseguir un nuevo Estatut. El primer secretario y ministro de Industria, que quiere que el trámite en las Cortes transcurra "sin problemas", apuntó: "A diferencia de otros, nosotros estamos dispuestos a ceder; no queremos un Estatut del PSC".

Miquel Iceta fue el segundo en apoyar estas tesis, pero insistió en no quitar protagonismo a las dos formaciones nacionalistas: convergentes y republicanos. El portavoz del PSC aseguró que existe "un terreno de encuentro" y muchos "puntos en común" entre las propuestas para un nuevo modelo de financiación que han planteado hasta ahora CiU y ERC, por lo que no consideró necesario presentar una propuesta del PSC o buscar una específica del tripartito. Iceta reiteró que "el Gobierno catalán como tal no ha hecho una propuesta ni le corresponde hacerla" y apostó por que el tripartito trabaje "tejiendo las alianzas".

Manuela de Madre concluyó por la tarde la escenificación de esa concordia que, según propia confesión, persiguen los socialistas. De Madre lo hizo tras reunirse con el presidente catalán, Pasqual Maragall, durante una hora en el Palau de la Generalitat, dentro de la ronda de contactos que Maragall mantiene con los líderes políticos. "Hemos de aprovechar las actuales circunstancias" y, además de buscar el consenso en el Parlament, trabajar de manera "discreta" para conseguir alianzas "fuera de Cataluña" y así lograr un "sí convencido" en el refrendo de las Cortes.