Bilbao acometerá el cuarto cambio en la OTA en menos de tres años

El Ayuntamiento de Bilbao acometerá el cuarto cambio en la OTA (aparcamiento limitado) en menos de tres años. El consistorio prevé simplificar para finales de este ejercicio el sistema actual de funcionamiento, que ha levantado multitud de críticas por su complejidad, y también modificará los colores de cada zona (azul, verde, marrón y naranja), que causan malentendidos.

La concejal de Circulación, Ibone Bengoetxea, dijo ayer que en dos meses presentará la nueva propuesta.

La capital vizcaína cuenta con el único sistema de aparcamiento limitado en Euskadi que obliga al usuario a teclear su matrícula mediante un complicado proceso que causa retrasos a los usuarios e incluso en muchas ocasiones ha impedido al automovilista adquirir el recibo. El Ayuntamiento ha defendido este procedimiento con el fin de evitar que un vehículo permanezca varias horas en el mismo lugar mediante el simple cambio de recibos.

Esta obligación existe desde septiembre de 2002 y despertó desde un principio multitud de críticas. Ante ello, se tuvo que pegar en cada máquina una guía para los usuarios, pero los problemas no han desaparecido.

Más de dos años y medio después, el equipo de gobierno se ha decidido a variar el sistema para que sea "más sencillo", según recalcó la edil de Circulación en el pleno de ayer. Bengoetxea agregó que en febrero se instalarán, a modo de prueba, varias máquinas expendedoras, que contarán con un teclado similar al de un ordenador para facilitar la inserción de la matrícula del vehículo.

La concejal admitió que este asunto es la "asignatura pendiente" de la OTA de Bilbao, pero consideró que el sistema vigente resulta válido y "ha conseguido los objetivos para los que fue diseñado". La oposición criticó el aparcamiento limitado vigente tras la gran modificación en abril de 2002, que volvió a registrar cambios un mes después. En septiembre de ese mismo año se incluyó la obligación de teclear la matrícula del vehículo.

El portavoz popular, Antonio Basagoiti, calificó la OTA como el "peor servicio municipal de la democracia" y enfatizó que es un sistema "absolutamente caótico" que ha tenido problemas "desde el minuto uno". Txema Oleaga, del PSE, indicó que desde 2002 "fue una chapuza, con un nivel de quejas extraordinario" y pidió su modificación urgente para que los usuarios "no tengan que ir con un libro bajo el brazo".

El pleno dio además luz verde al primer trámite -la aprobación inicial del cambio en el PGOU, el Plan General de Ordenación Urbana- que permita acometer la construcción de la torre de Abandoibarra, donde se ubicará Iberdrola. Es la tercera vez que el PGOU se modifica por el rascacielos, que en principio iba a ser sede de la Diputación.