"Que tire el que lo meta"

Iniesta encaró a Luiz Alberto y acabó en el suelo después que el central rechazara limpia la pelota. El árbitro Rodriguez Santiago, sin embargo, pitó penalti. Los jugadores de la Real Sociedad protestaron enérgicamente. Los del Barcelona, mientras, advirtieron cómo Ronaldinho tomaba la pelota. Al brasileño se le le acercó entonces Eto'o y, finalmente, el camerunés tiró la pena máxima. ¿Qué pasó entre los delanteros. Eto'o lo contó ayer, después el entrenamiento matinal: "Cuando me siento bien y tengo confianza yo pido tirar los penaltis. Miré a quien tenía que mirar y lo lanzé yo. Pasó que lo chuté mal y fallé". El pichichi liguero -14 tantos- había convertido anteriormente los dos que había lanzado (Santander y Mallorca). Y asegura que volverá a asumir la responsabilidad siempre que se sienta capaz de marcar.

"Lo decidimos por norma en el mismo campo", corroboró también Ronaldinho al final del ensayo vespertino. "Hablamos y después resolvemos quién tira". No miente. Frank Rijkaard le da la razón. "Los tira quien se siente seguro", aseveró. "Yo sólo pido que el que lo tire, lo meta".

Hasta el momento, aciertan más que fallan. Al Barça le han pitado nueve penaltis a favor y ha transformado seis: Ronaldinho lleva tres lanzados y tres marcados en Liga (Osasuna, Real Madrid y Valencia ); en la Liga de Campeones falló contra el Celtic en Glasgow. El único error de Eto'o se produjo el pasado domingo contra la Real. Y, finalmente, Iniesta falló en Donetz contra el Shakhtar, el único que ha lanzado en lo que va de temporada. Aquel día, en Ucrania, no estaban en el campo ni Ronaldinho ni Eto'o. Tampoco Deco. Entre los tres deben dedicir siempre quién afronta el tiro. El entrenador considera, además, que Xavi, Márquez o Gio son futbolistas en los que se puede confiar en la línea de once metros. "Para tirar penaltis", convino el técnico, "hay jugadores de sobra"

Más preocupado parece cuando se le plantea sobre las jugadas de estrategia y, sobre todo, los los saques de esquina. "Normalmente, por lo que hemos visto hasta ahora, todos los equipos tienen más capacidad en el juego aéreo que nosotros", reconoció el entrenador, en conversación con este diario. Únicamente tres de los 36 goles logrados por el Barça han sido de cabeza en jugadas a balón parado: remató un córner Larsson ante el Numancia y valió tres puntos (1-0); Gerard metió el gol que no impidió la derrota en campo del Betis (2-1), y Eto'o le ganó el partido a la Real Sociedad el pasado domingo. Puede que la estadística haya influido en los entrenamientos: Rijkaard ha decidido incrementar la atención en las acciones de estrategia, que se practican de forma especial en la víspera de cada partido. El técnico ha incidido igualmente en los lanzamientos de falta. Al final de cada sesión, Ronaldinho, Márquez, Deco y Gio se ejercitan. En esas jugadas, Rijkaard sólo pone una condición: "Cuando el balón está cerca del borde del área, deciden ellos". Ronaldinho suele tirar la primera del partido y luego concede oportunidades según se lo pidan los compañeros. Pero cuando la falta está más lejos, Rijkaard prefiere a Márquez. "Considero que desde lejos es mejor tirar a romper y Rafa chuta muy fuerte. Por eso, en ese caso es el primero de la lista". En el Barça mandan los biorritmos.