Camps celebra hoy en Murcia su 18º encuentro con Valcárcel, para hablar de nuevo sobre el agua

Los presidentes de la Comunidad Valenciana y de la Región de Murcia, Francisco Camps y Ramón Luis Valcárcel, ambos del PP, mantienen una fluida relación: hoy celebrarán en Murcia su encuentro número 18 desde que el primero accedió a la Generalitat, hace ahora 18 meses. Y siempre con el agua como principal, si no exclusivo, tema de conversación. Hoy se reúnen para preparar las movilizaciones que el PP anuncia de cara al aniversario de la derogación del trasvase del Ebro que preveía el Plan Hidrológico Nacional. Por la tarde inaugurarán dos depuradoras.

La intensa relación que Camps mantiene con Valcárcel -ambos se han visto una vez al mes desde que el primero accedió a la Generalitat, en el verano de 2003- contrasta con la escasez de contactos del presidente valenciano con otros presidentes autonómicos de comunidades vecinas. En todo este tiempo el titular de la Generalitat se ha reunido una vez con el de Baleares, Jaume Matas, y otra con la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, y ha mantenido además una reunión conjunta con ambos dirigentes, del PP como el propio Camps. Por lo que respecta a las otras tres comunidades autónomas vecinas, gobernadas por los socialistas, el titular del Consell ha visitado al presidente de Castilla-La Mancha -en aquel momento José Bono, ahora ministro de Defensa- y se encontró con el de Aragón, Marcelino Iglesias, en un debate cara a cara organizado por EL PAÍS a principios de junio del año pasado para hablar sobre el trasvase del Ebro. Camps no se ha entrevistado todavía con el presidente de la Generalitat de Catalunya, Pasqual Maragall, aunque en los últimos días ambos gobiernos han mantenido contactos para recuperar una relación que sí existió en la etapa de Eduardo Zaplana, con Jordi Pujol al frente de la Generalitat de Catalunya y que en los últimos meses se ha visto afectada por los conflictos surgidos en torno al agua, la lengua y el proyecto de la eurorregión.

La 18º reunión que Camps mantendrá hoy con Valcárcel, en Murcia, tendrá, como casi todas las anteriores, el agua como principal argumento. Aparte de inaugurar juntos varias depuradoras, los dos presidentes prepararán la "gran movilización" a favor del trasvase anunciada por el dirigente valenciano, que está previsto que se celebre con motivo del primer aniversario de la derogación del trasvase del Ebro que preveía el PHN aprobado por el anterior Gobierno central, del PP.

Camps aseguró ayer que la "inmensa mayoría" de los españoles está a favor del trasvase del Ebro y destacó que todavía "no existe la alternativa que el Gobierno propuso para paralizar el trasvase". El presidente valenciano, que hizo esta afirmación en una entrevista radiofónica, añadió que "nadie ha puesto sobre la mesa ningún proyecto u obra" capaz de paliar el déficit hídrico existente en la Comunidad Valenciana, Murcia o Almería.

Camps recordó que su Gobierno y el de Murcia han iniciado "la preparación de movilizaciones sociales que culminarán en junio, con motivo del primer aniversario del decretazo del Gobierno socialista para la paralización del trasvase del agua del Ebro" y añadió que "hay 1.200 millones de euros de fondos europeos que España puede perder por el capricho de esta decisión".

El consejero de Infraestructuras y Transportes de la Generalitat, José Ramón García Antón, también habló del agua. En una conferencia de prensa en la sede del PP en Valencia en la que estuvo acompañado por el vicesecretario regional del partido, Ricardo Costa, señaló que han pasado 10 meses desde la derogación del trasvase del Ebro contemplado en el PHN y la presentación del programa Agua, el cual, según el consejero, "se ha quedado totalmente en agua de borrajas porque no se ha hecho absolutamente nada".

García Antón aseguró que "se ha abierto una caja de pandora" al "romper una política que había buscado el consenso y el diálogo" y, al respecto, puso como ejemplo la situación del trasvase Tajo-Segura, ahora puesto en duda por Castilla-La Mancha. El consejero lamentó que "pasa el tiempo" y el "programa alternativo" al trasvase "no se hace".

Andrés Perelló, portavoz adjunto del PSPV en las Cortes Valencianas, acusó al consejero de "anteponer los intereses del PP a los de la Comunidad Valenciana" y le pidió que deje de "decir mentiras sobre el programa Agua" puesto en marcha por el Gobierno español. Perelló afirmó que a García Antón "le gusta mucho intoxicar en cuestiones de infraestructuras y muy poco dar cuenta de sus responsabilidades" y lo definió como "el abanderado del PP valenciano en el enfrentamiento sinsentido que mantiene el Consell con el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero".