_
_
_
_
Crítica:POP | Luna
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

El gusto por la buena música

Entonando el adiós final a 12 años de carrera, según ha confesado el vocalista, guitarrista y compositor del grupo Dean Wareham, la banda de rock Luna está realizando una gira mundial para presentar las canciones de su último disco, Rendezvous, y revisar de paso los mejores momentos de un grupo cuya trayectoria vino siempre definida por el exquisito gusto por la buena música.

Velvet Underground, Televisión, Joy Division, Serge Gainsbourg, Neil Young o Lee Hazlewood son algunas de las innegables influencias de este cuarteto, cuyo estilo ha sido definido como dream pop por la delicadeza casi onírica de sus producciones musicales. Iniciando su actuación con un tema de su último disco, Malibu love nest, Wareham y los suyos ofrecieron una sutil velada en la que sobraba cualquier exceso de volumen o estridencia.

Luna

Dean Wareham (voz y guitarra), Sean Eden (guitarrista), Britta Phillips (bajo) y Lee Wall (batería). Sala Arena. Madrid, miércoles 12 de enero.

La voz de su solista, en la línea talk & sing del bardo más conocido de Coney Island -Lou Reed-, fue desgranando un rosario de memorables canciones en las que los dedos hábiles del guitarra solista Sean Eden marcaban los tiempos con intención heredada de otro componente de la Velvet: el guitarrista Sterling Morrison, quien también colaborara con ellos a lo largo de su carrera. Mientras, la base rítmica iba deslizando un tempo delicado, personal y agradable de llevar. Es curioso cómo la concepción rítmica del grupo está directamente al servicio de las canciones y no al revés. Sería inútil reclamarles más marcha o el peso específico de un riff de guitarra. Simplemente porque quebrar esa levedad que proponen haría que las canciones dejasen de funcionar, y eso es lo importante en Luna: la suavidad de unas canciones que calan sin agredir.

Última visita

El repertorio dejó netamente satisfechos a los muchos asistentes que se acercaron a despedir al grupo en su última visita, resaltando la excelente ejecución que Luna hizo de The owl and the pussycat, tema nuevo con leve toque bosanova, o sus viejos éxitos Bewitched, Black postcard, Time to quit o Fuzzy wuzzy, con las que la banda terminó su actuación. Fue una dulce despedida a cargo de un grupo que en sus 12 años de existencia nunca protestó por quedar fuera de los focos del reconocimiento y la fama. Triste, pero así se escribe la historia.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_