Dos goleadores deprimidos

Que los delanteros funcionan a rachas es algo obvio. Que se lo digan al valencianista Marco Di Vaio y a Vladimir Manchev, del Levante, que mañana se miden en Mestalla en un derby histórico y que sufren ahora un bache anotador tras un espectacular inicio de Liga. La lista de los máximos goleadores en la jornada séptima les situaba en la cumbre con cinco goles cada uno. Di Vaio hacía honor a su paso por la Juve -una Liga, una Copa y dos Supercopas- y la selección italiana, y el búlgaro Manchev, también internacional, se confirmaba como la revelación de la Liga. Diez jornadas después, sus registros permanecen helados mientras que 15 futbolistas, Eto'o al frente, les han superado.

Di Vaio no marca en Liga desde el 2 de octubre, cuando anotó en el campo del Betis tras marcar al Athletic, Real Sociedad (dos) y Deportivo. Suma 572 minutos sin celebrar un tanto y ha perdido la titularidad a favor de Corradi o Mista. Sólo un gol ante el Anderlecht, en Liga de Campeones, ha aliviado su sequía. Manchev acumula 813 minutos sin ver puerta, aunque la semana pasada, con Bulgaria, celebró un gol en Mestalla contra la selección valenciana. Pese a su desacierto, ambos son los máximos goleadores de sus equipos, símbolo de que ni Valencia ni Levante andan sobrados de puntería. El conjunto azulgrana lleva siete partidos seguidos sin ganar. "Nos faltan goles y experiencia", asegura Manchev.

"No tengo la misma confianza que a principio de temporada", reconoció Di Vaio el mes pasado, "llevo demasiado tiempo sin marcar y sin hacer un buen partido. No es un problema del equipo, porque tenemos ocasiones, depende de mí". El técnico, Claudio Ranieri, ha castigado su bajón: es el jugador del Valencia más veces sustituido (nueve). "Jugando así es normal. Espero que esto acabe pronto", admite el italiano.

Manchev simboliza el peor defecto del Levante. El conjunto de Schuster juega mejor que sus rivales, pero le falta pegada. Manchev se ha estancado y Sergio García no encuentra el gol. El búlgaro, procedente del Lille, acabó al principio de curso con la desconfianza de Schuster, que en su presentación dijo que no le conocía y que esperaba "algo más". Los goles, cinco en siete partidos, cambiaron el discurso. "Es ágil, dinámico y remata muy rápido. No es el clásico ariete que no se mueve", dijo el segundo entrenador, Manolo Ruiz. "Es muy completo, puede llegar a ser como Penev. Ha hecho goles siempre y no ha alcanzado su mejor nivel", le definió su seleccionador, Hristo Stoichkov.

Valencia y Levante se enfrentan mañana en Mestalla en un derby inaudito en Primera desde enero de 1965, hace 40 años. Ninguno de los futbolistas actuales de ambos equipos había nacido entonces. Ranieri tenía 13 años y Schuster, cinco.