El año de la rima

Sólo Antena 3 ofreció batalla a TVE. Era David contra Goliat o, más de moda, Don Quijote contra los molinos. Pero, otra vez, volvió a ganar Goliat. La estrategia de Tele 5 consistió en no inmiscuirse en tan desigual combate a sabiendas de que el gran ganador de la noche era, sin duda, José Luis Moreno, el molinero que trabajaba en los dos bandos.

- TVE-1. Sobrados

Antes de los campanazos, Cruz y Raya hilvanó con El señor de los anillos una retocada sátira de la actualidad. La ilustración de Urdaci, el dragón que retenía a la princesa Leticia, inició el trabajo de la camaleónica pareja. Buenas caracterizaciones, algún guión sobresaliente y algo de relleno sirvió para caldear la noche. Desde hacía semanas los mensajes de móviles -pásalo- hacían referencia a la rima perversa del año 2005, y Ramón García lo sabía. "Este año viene con rima", afirmó. Con su capa vampiresca, junto a la siempre semivestida Ana García Obregón, repasaron el consabido manual de instrucciones del reloj. Tras las campanadas, Ramonchu encajó la broma: "Preparen la rima. ¡Feliz 2005!". A partir de ese momento todo se convirtió en noche de fiesta, pero sin lencería. Bisbal, la Pantoja y Ainhoa Arteta iniciaron una gala repleta de triunfitos. Mar Saura y María José Suárez pusieron sus tablas y sus escotes. El primero horizontal y el segundo vertical, imposible, y a juego con la pierna izquierda. La voz cantante -porque cantaron- la llevaban Bertín Osborne, con melena, y Álex, muy suelto. Los cuatro alentaban a los cantantes a volver a repetir a capela alguna estrofa de lo escuchado en playback para dar un poco de realismo. Todos los cantantes eran previsibles, salvo Rod Stewart que parecía el típico guiri de la fiesta a quien nadie sabe quién ha invitado. Luego, copa en mano, la pregunta de rigor. ¿Qué le pides al nuevo año? Todos pidieron salud, salvo Manolo García que pidió el cumplimiento del protocolo de Kioto (¡toma ya!) y, por supuesto, paz.

- Antena 3. Tímida alternativa

La comedia de José Luis Moreno, Aquí no hay quien viva, era el principal arsenal con el que se enfrentó a TVE. Después de una mayonesa de imágenes del año, un capítulo especial de la serie hizo frente a Cruz y Raya hasta la aparición de tres de los actores en la Puerta del Sol. Eduardo Gómez, Malena Alterio y Luis Merlo tomaban la alternativa. Calentitos, dentro de una habitación con vistas al reloj, seguro que escuchaban los grititos de la Obregón, su vecina de azotea. Después del estruendo vino otro nuevo programa de zapeo, con mucho Homo zapping, maquillado con presentadores de la cadena. Paula Vázquez, muy guapa y Javier Martín, muy cantarín -va de rimas la noche- alternaron con otras figuras como Jaime Cantizano, que retransmitió una hora después las campanadas desde Canarias. A las 2.00 se acabó todo. La teletienda, campando por sus respetos, llenó la noche de aparatos para hacer musculación y ancianitos admirados de cómo en su cocina había aparecido una señorita para venderles una licuadora, temerosos de ser licuados ellos también.

- Tele 5. De excursión

Después de un zapeo por lo archivisto, la cadena encaró las campanadas como una excursión. El año pasado nos enseñó el Fórum, el anterior, los pesqueros de Muxía, y esta nochevieja se fueron todos a Consuegra, cerquita de El Quijote. Todos no. Carmen Alcayde repitió tarea, pero esta vez no la acompañaba Jorge Javier Vázquez, su pareja natural o antinatura. La presentadora, con voz de frío mesetario, se acompañaba de Jordi González (¿qué he hecho yo para merecer esto?). Como si fuera la lotería de Navidad, el número cinco también fue muy tempranero. Carmen Alcayde lo cantó enseguida: "en la campanada número cinco he pedido un yate con muchos marineros". Se entiende que, el año que viene, Tele 5 vuelve a Muxía pero, esta vez, en yate.