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Pla se compromete a sacar a los valencianos de la "autarquía" política generada por Camps

El PSPV exige el reconocimiento de "nacionalidad histórica" y critica la parálisis del Consell

Los socialistas valencianos estiman que el PP ha sometido a la Comunidad Valenciana durante este año a la "autarquía", es decir un régimen de autosuficiencia económica y política que ha deteriorado las relaciones con las regiones del entorno y ha sometido a sectores productivos tradicionales a una situación de crisis. Joan Ignasi Pla, secretario general del PSPV, hizo balance ayer en Alicante del año político reivindicando la consideración de "nacionalidad histórica" para la Comunidad Valenciana y criticó que la crisis del PP se haya extendido "al resto de las instituciones".

El líder del PSPV, acompañado por Diego Macià, alcalde de Elche y presidente del PSPV, compareció ante los medios de comunicación de Alicante al término de la reunión del consejo territorial del partido, que hizo balance del año que expira. Joan Ignasi Pla quiso transmitir un mensaje de "seguridad y confianza" y adquirir el firme compromiso de sacar a la Comunidad Valenciana de la "autarquía política", que a su juicio, el PP ha impuesto. Los socialistas basan este diagnóstico, que rememora los años del franquismo, en la falta de relaciones institucionales con las regiones vecinas y la crisis económica que azota a varios sectores productivos.

Una situación a la que no se ha hecho frente debido a las discrepancias entre los partidos del Camps y de Zaplana. "Si en enero la crisis afectaba al seno del PP, 12 meses después se extiende al resto de instituciones", comentó Pla que recordó las dos instantáneas que visualizan esta situación, por un lado el plante en las Cortes que un grupo de diputados dieron al presidente, Francisco Camps y la elección de compromisarios en Elche que acabó en trifulca. "Alicante es el exponente del deterioro del PP", dijo Pla, que resume el año 2004 como el del "fracaso de Camps, que pacta con el diablo para sobrevivir", en alusión a sus acuerdos con Fabra, Ortuño o Alperi.

Pla cree que Camps es "prisionero de sus luchas" y por eso el fracaso en la gestión es "evidente". El secretario de los socialistas fue más allá en sus críticas al acusar a Camps de pasarse el año "tocando la lira, mirando hacia otra parte" y sin afrontar problemas como las crisis del calzado o del textil y las relaciones con otras comunidades. "Las consecuencias del desgobierno las pagan los ciudadanos", sentenció Pla, que puso como ejemplo la parálisis de gestión de Terra Mítica y de la Ciudad de la Luz en Alicante, que disparan la deuda de la Generalitat, y las deficiencias en educación y sanidad. Pla recordó cómo Alicante es la provincia en la que han cerrado un mayor número de empresas, el paro ha subido y el calzado cierra un año negro. "El PSPV tendrá una presencia activa para que el Gobierno central se interese con planes específicos para relanzar el turismo, el comercio y las pequeñas y medianas empresas", anunció Pla.

El líder socialista ofreció un partido "activo para sacar de la autarquía política" a los valencianos y situarlos en el centro del debate político. Pla vaticinó que el año 2005 será "crucial" para el bienestar y el liderazgo valenciano en temas como la reforma del Estatuto. Para el responsable socialista la Comunidad Valenciana reúne el perfil y cumple los requisitos para que sea reconocida su condición de "nacionalidad histórica", con una lengua propia, una cultura y un derecho civil, por eso defiende un modelo territorial de España "plural" y critica que el PP "nos aísle" sin aportar una alternativa.

Por su parte, Joan Ribó, portavoz de Esquerra Unida-L'Entesa en las Cortes, consideró que Camps "ha desplazado al PP valenciano hacia la extrema derecha durante su corto periodo de gobierno, ha continuado con los peores vicios de la era de gobierno de Eduardo Zaplana" y "ha añadido elementos nuevos de crispación muy peligrosos con el tema de la lengua, el enfrentamiento con otros territorios y el victimismo más zafio".

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