Sólo pasa uno de cada diez socios
El pasado 17 de diciembre, el centro de mayores Benito Pérez Galdós, situado en el barrio de Pacífico (Madrid), celebró con motivo de las navidades un refrigerio con baile como cada año. Lamentablemente, en esta ocasión sólo se ha permitido la asistencia al 10% de los socios.
Las dos puertas de entrada al local dedicado a ello estaban controladas por sendos directivos que dejaban pasar solamente a las personas que tenían invitación, siendo discriminados el resto de los socios, a los que se les impidió la entrada.
Yo me pregunto: ¿por qué unos socios sí y otros socios no? La respuesta parece clara: no ser amigos de la directiva. Estas actuaciones de favoritismo nos hacen retroceder a tiempos que no eran democráticos y es una vergüenza que hoy, en democracia y con dinero público, se repitan las feas costumbres de aquella época.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.