Desarticulada una red que obligaba a prostituirse a mujeres de Europa del Este

El Cuerpo Nacional de Policía ha desarticulado una red de trata de mujeres integrada por seis bosnios y una ucrania, que traían ilegalmente a España a ciudadanas de Europa del Este y las obligaban a prostituirse, según informó ayer el Ministerio del Interior. A los detenidos se les imputan los delitos "contra los derechos de los ciudadanos extranjeros", "relativos a la prostitución", "robo" y "estafa", falsedad documental", "tenencia ilícita de armas", "tráfico ílicito de vehículos" y estancia ilegal.

Las investigaciones comenzaron en septiembre pasado, cuando se detectó un trasiego continuo de mujeres en una vivienda de la calle de Hernández Rubín número 7 de Madrid, frecuentada también por unos individuos que conducían vehículos caros con matrícula extranjera.

La policía comprobó que los habitantes de la vivienda no desarrollaban ninguna actividad laboral, lo que contrastaba con el alto nivel de vida que mantenían.

La vigilancia policial permitió constatar desplazamientos entre esa vivienda y otras en la calle de Colonia de Occidente número 14 y la travesía del General Franco, 12-14, así como asiduas salidas a bingos y otros locales con máquinas recreativas y tragaperras, en las que los presuntos delincuentes gastaban mucho dinero.

También hacían frecuentes compras en establecimientos comerciales, que abonaban con tarjetas de crédito robadas en entidades extranjeras y posteriormente falsificadas manipulando su banda magnética.

"Varios miembros de esta organización son personas corpulentas, violentas y portadoras de armas de fuego", cargadas y en perfecto estado de uso, que usaban para "amedrentar y doblegar la voluntad de sus víctimas", según ha explicado Interior en un comunicado.

Registro

Tras el registro en las tres viviendas, la policía ha intervenido dos pistolas -una Smith and Welson de calibre 38 y otra italiana, de calibre 8- y diversa munición, incluidos 16 cartuchos para otra pistola, una Parabellum de 9 milímetros.

También ha requisado dos vehículos de gama alta, 12 pasaportes de diversas nacionalidades -algunos de ellos denunciados como sustraídos-, 12 tarjetas de crédito robadas, numerosos relojes, pulseras y joyas de oro, documentación falsa para vehículos, y una buena cantidad de solicitudes de permiso de residencia y trabajo para mujeres del Europa del Este.

Los detenidos han sido identificados como los bosnios Amela K., de 24 años; Selver S., de 35; Saladin S., de 18; Pino G., de 32; Sedjic M., de 45, y Adrian S., de 26, y como la ucrania Ludmila K., de 28 años.

Los delitos de que se les acusan van desde la tenencia ilícita de armas, la estafa, la asociación ilícita, la estancia ilegal en España, a otros relativos a la prostitución, la Ley de Extranjería y la falsificación de documentos.