El número de adolescentes que esnifan cocaína se ha triplicado, según un estudio

El número de jóvenes de entre 14 y 18 años que consumen cocaína en la Comunidad de Madrid se ha triplicado en los últimos cuatro años. En cambio, ha descendido el número de escolares que afirman haber tomado éxtasis y otras drogas de diseño. Estos datos, que fueron ayer facilitados por el gerente de la Agencia Antidroga, Manuel Molina, son el resultado de una encuesta sobre drogas realizada entre 3.000 escolares madrileños de entre 14 y 18 años.

El consumo de alcohol, tabaco, hachís, cocaína, tranquilizantes, éxtasis y otras sustancias suele comenzar en los jóvenes madrileños entre los 14 y 18 años. Los datos obtenidos en esta encuesta sobre drogas son, según Molina, "motivo de preocupación" para las autoridades, porque reflejan una tendencia "creciente" en el consumo de estas drogas. El hachís, con un 26,2 % de prevalencia de consumo habitual entre estos jóvenes, figura como la sustancia de mayor consumo dentro de las drogas ilegales, y, según la encuesta, uno de cada cuatro adolescentes la consume, lo que representa un incremento de 1,3 puntos respecto a los datos obtenidos en esta misma encuesta hace dos años. El 30% de ellos reconoció que sufría pérdida de memoria, dificultad para estudiar o trabajar (el 19,7%), tristeza, ganas de no hacer nada o depresión (17,1%), y sólo un 6,6% dijo que le ocasionaba enfermedades o problemas físicos.

La cocaína, por su parte, es la sustancia que ha registrado un mayor incremento, sobre todo entre los varones, al haberse triplicado su consumo habitual en los últimos cuatro años hasta situarse en el 3,4%, lo que significa, según Molina, "un incremento del 309%". Los chicos siguen adelantando a las chicas en esta faceta (el 4% frente al 2,8%).

Como aspectos positivos de esta encuesta, el gerente destacó el descenso paulatino del consumo de éxtasis y otras drogas de diseño (del 1,9 en 2002 al 1,2% en 2004), aunque advirtió de que "no podemos bajar la guardia", ya que las cifras de emergencias hospitalarias por ingesta de éxtasis (ocho casos en un año) no ha variado respecto a ejercicios precedentes.

También se ha observado una disminución del consumo habitual de tranquilizantes sin prescripción médica y cierta estabilidad en el consumo de speed, alucinógenos, anfetaminas -por debajo del 1%- y heroína (0,1%).

De la encuesta también se desprende el dato de que el 32% de los adolescentes de la Comunidad no consumen habitualmente ninguna sustancia adictiva, legal o ilegal. La mayor parte de los no consumidores se concentra entre los 14 y los 16 años.

Ocio alternativo

Las razones que esgrimen los encuestados para no consumir sustancias ilegales son que se sienten bien y no juzgan necesario consumirlas (56%), y que ello perjudicaría su salud física y mental (53,4); el 27,8% asegura además tener un ocio alternativo.

Respecto a la actitud de las familias, Molina considera que los padres son "bastante o muy permisivos" con el consumo de alcohol de sus hijos. Sólo el 16% de los progenitores se opone a este consumo, aunque sí son muchas las familias (88%) que prohíben el consumo de cocaína y éxtasis.