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CRISIS EN EL GOBIERNO DE JEREZ

Los ediles del PSA de Jerez dimiten alegando que es un "cachondeo nacional"

La alcaldesa García Pelayo sustituye a los concejales en el gobierno en cinco minutos

El gobierno local de Jerez saltó ayer, definitivamente, por los aires con la dimisión en bloque de los ocho concejales del PSA que aún permanecían en el mismo tras la destitución el pasado viernes de su líder y hasta entonces delegado de Urbanismo, Pedro Pacheco. Los ediles andalucistas tildaron la situación de "cachondeo nacional", mientras que la alcaldesa de Jerez, María José García Pelayo (PP), tardó cinco minutos en sustituir a los dimisionarios por concejales populares.

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Los ocho delegados del PSA cesaron en sus responsabilidades de gobierno minutos antes de las 12,00, tras presentar por escrito en el registro municipal su renuncia. Los nacionalistas explicaron que, tras la destitución de Pedro Pacheco, habían decidido dar un plazo de tres días a la alcaldesa de la ciudad para que dimitiera. "Le hemos dado una oportunidad para que pudiera recuperar algo de su dignidad y honestidad política, pero no lo hecho", manifestó el concejal y ayer portavoz del PSA, Antonio Sánchez. Los compañeros de Pacheco justificaron su decisión de dimitir del gobierno asegurando que no están dispuestos a seguir siendo "cómplices" de la rocambolesca situación generada en el Consistorio jerezano. "No vamos a colaborar", declaró Sánchez, "con esta pantomima que ni en el circo harían mejor". El edil del PSA lanzó un claro mensaje a la alcaldesa: "Todo para ella, nosotros pasamos a ser simples concejales del PSA porque esto se ha convertido en un cachondeo nacional".

Tras la renuncia del grupo municipal andalucista subyace la postura adoptada del PSOE, que no estaba dispuesto a iniciar negociaciones con el partido de Pacheco mientras sus concejales se mantuvieran en el equipo de García Pelayo. A partir de ahora el camino parece más franco para un posible acuerdo PSOE-PSA que devuelva a Jerez una situación política estable. Antonio Sánchez, no obstante, negó que la dimisión en bloque suponga "un guiño" a los socialistas, aunque, inmediatamente, añadió: "Alabamos el respeto a los tiempos políticos que está marcando el PSOE".

La alcaldesa de Jerez compareció apenas cinco minutos después de hacerlo los nacionalistas para comunicar su decisión de seguir gobernando en minoría y dar a conocer a los sustitutos de los ya ex delegados del PSA. Los seis ediles del PP que la acompañan en el gobierno -hay un séptimo, Eduardo Perea, de baja por enfermedad- se reparten desde ahora las áreas de Recursos, Participación Ciudadana, Salud y Género, Planes de las zonas norte y sur, Cultura, Deportes y Seguridad, hasta ayer en manos de los andalucistas.

"Asumo totalmente mi responsabilidad porque en el PP somos capaces de gobernar en minoría", indicó la regidora jerezana. García Pelayo defendió su legitimidad como alcaldesa comprando la situación de Jerez con la de Arcos de la Frontera (Cádiz), donde el PSOE gobierna en minoría tras la ruptura del pacto que mantenía con IU pese a que el PP fue la lista más votada.

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La alcaldesa también formuló un ofrecimiento a todos los partidos políticos de la Corporación, "incluido el PSA", para alcanzar acuerdos puntuales que permitan sacar adelante temas fundamentales para la ciudad como los Presupuestos para 2005. Al mismo tiempo, García Pelayo expresó su convencimiento de que PSOE y PSA tienen ya cerrado un pacto para desbancarla como inquilina de la alcaldía de Jerez.

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