Un atentado con bomba causa 15 muertos en un mercado de Filipinas

Al menos 15 personas murieron y otras 60 resultaron heridas al estallar ayer una bomba en un mercado de la ciudad filipina de General Santos, en la sureña y conflictiva región de Mindanao. Tres de las 15 víctimas mortales perecieron en el mismo zoco y los demás en el hospital, entre éstos el niño de cinco años Nico Plomeda. La explosión se produjo a media tarde, cuando el mercado se encontraba muy concurrido con familias de compras navideñas.

"Nuestros soldados, en colaboración con la policía, tratan de determinar el tipo de artefacto explosivo", manifestó el jefe del Mando Sur de las Fuerzas Armadas, teniente general Alberto Braganza, aunque apuntó que pudo tratarse de una granada de mano. Tampoco se descarta que fuese una bomba de fabricación casera, debido a que algunos testigos declararon haber visto antes de la explosión a un individuo con una caja dentro de una bolsa de plástico.

Ningún grupo armado ha reclamado la autoría. El senador Richard Gordon, actual presidente de la Cruz Roja de Filipinas, aseguró que se trata de "una agresión terrorista" y criticó a los cuerpos de seguridad por no prevenir la explosión. "Ellos sabían que había un plan para perpetrar este acto", manifestó.

El director de la policía de Mindanao Central, Antonio Billones, admitió que meses atrás recibieron informaciones de los servicios de espionaje donde se afirmaba que una célula de la organización Yemáa Islamiya, considerada el brazo regional de Al Qaeda, planeaba colocar bombas en puntos clave de Mindanao, incluido General Santos. Yemáa Islamiya perpetró, entre otros, los atentados en la isla indonesia de Bali en octubre de 2002, que causaron 202 muertos.

"La amenaza terrorista es de hace tiempo, pero no por eso la descartamos", añadió Billones, quien, no obstante, se inclinó por culpar de la explosión de ayer a la disputa que mantienen desde hace varios días los vendedores del mercadillo por los puestos. El alcalde de General Santos, Pedro Acharon, señaló que a su oficina habían llegado ambas informaciones. "El jueves pasado, recibimos informes de que iban a quemar el mercado. Nosotros nos preguntamos por qué. Entonces llegó otro informe sobre la lucha entre grupos rivales de vendedores", relató Acharon.

Mientras se averigua la autoría, Braganza ordenó reforzar la seguridad en esa ciudad de mayoría cristiana que ha sido escenario en el pasado de atentados terroristas. En Mindanao operan la organización islámica Abu Sayyaf y el independentista Frente Moro de Liberación Islámica.