Imprescindible Iniesta
La lesión de Larsson multiplica el protagonismo del centrocampista del Barça, al que Rijkaard no quiso ceder "porque siempre aporta algo nuevo"
No es titular, pero Andrés Iniesta, (Fuentealbilla, 1984) juega siempre en el Barcelona. En los doce partidos de la Liga y los cuatro de la Liga de Campeones disputados hasta ahora es habitual que Frank Rijkaard utilice al centrocampista, ya sea como despertador del equipo o como temporizador. O sustituye al punta de la banda derecha o al falso delantero centro o actúa de complemento en el medio campo. Iniesta se ha convertido para el técnico azulgrana en el jugador número 12. Tras la lesión de Larsson, el albaceteño parece llamado a cobrar aún mayor presencia en los partidos, seguramente porque sus valedores -Txiki Begiristain, secretario técnico, por ejemplo-, no dudan de que "hay tanto fútbol en su cabeza que puede jugar en cualquier sitio, donde le pidan".
Iniesta, que lidera el juego de la selección sub-21 que entrena Iñaki Sáez, no se inmuta ante los elogios, y comenta: "Hay que mirar mucho y aprender más de mis compañeros en el vestuario", lugar donde se reencontró con Carles Puyol. Crecieron juntos en La Masía e Inieta le reconoce como uno de sus principales apoyos al llegar al Camp Nou. El capitán, como el resto de los compañeros, tardaron muy poco en rendirse a su grandeza. Los veteranos hace ya tiempo que le guardan respeto. "Andrés es un jugador joven pero con una calidad impresionante. Para nosotros es uno más, tan importante como cualquiera", asegura Xavi.
Una peña 'blanca'
Capaz de jugar con naturalidad tanto con la pierna izquierda como con la derecha -lleva cuatro disparos a puerta en la Liga, dos con cada pie-, es especialmente hábil a la hora de forzar faltas -siete- como tarjetas -cinco-. Admirador de Laudrup y Guardiola, busca el pase interior y exterior y, sobre todo, la asistencia. José Antonio, su padre, cuenta que Andrés eligió ser del Barça por el impacto del dream team, cosa rara en un pueblo tan blanco que 170 de los 200 socios de la Peña Iniesta son del Madrid. "Estamos tan orgullosos de él en el pueblo que, más que del Barça o del Madrid, somos de Andrés", dice Juan Montero, alcalde de Fuentealbilla.
Iniesta acaba de firmar un nuevo contrato con el Barça por cinco temporadas -percibirá casi un millón y medio de euros al año más incentivos-, después que fuera tentado por varios clubes, entre ellos el Madrid. Entienen en el Camp Nou que el centrocampista está llamado a liderar al equipo en un futuro no lejano. "Yo estoy para lo que el entrenador me pida", intercede el futbolista. "No tengo ninguna prisa. Todo llegará".
Prepara el examen de ingreso a la universidad con la misma paciencia con la que trabaja para convertirse en titular del Barça, pero dice sentirse "útil" con los minutos que le regala cada partido el entrenador, al que escucha atento cuando le insiste en que juegue como sabe. "Con eso me basta, porque casi todo lo hace bien" dice Rijkaard, que no atendió a Txiki Begiristain cuando el secretario técnico le propuso cederlo a un equipo de Primera esta temporada con el fin de que se curtiera. "Cuento con él", le dijo el holandés a Begiristain. "Cada vez que sale al campo aporta algo nuevo", insistió Rijkaard durante el verano.
Y el técnico no mentía: Iniesta es su recurso más habitual. , a partir de ahora, con la enfermería repleta, el joven cerebro azulgrana resultará imprescindible.
Barcelona: Valdés: Belletti, Puyol, Oleguer, Van Bronckhorst; Xavi, Márquez, Deco; Giuly, Ronaldinho y Eto'o.
Celtic: Hedman; McNamara, Varga, Valgaeren, Thompson; Petrov, Lennon, Pearson, Camara; Hartson y Sutton.
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