El siniestro alteró la tensión en toda la red y extendió el apagón

El incendio en la subestación de Unión Fenosa del Cerro de la Plata provocó una oscilación en la tensión de la red de transporte que afectó a otras instalaciones y extendió el apagón por el centro de Madrid. Según Iberdrola, uno de los dos transformadores que mantiene en la calle de Ayala se desconectó, y 15.000 hogares del barrio de Salamanca se quedaron a oscuras. En 34 minutos, según la empresa, fue restituido el servicio.

La complejidad de la red de transporte, una especie de malla que se mantiene en tensión permanente, supone que cualquier alteración significativa en la circulación de la energía pueda afectar a otros puntos clave en la distribución de la electricidad. Así sucedió ayer.

Según explicaron las empresas suministradoras, el incendio en la subestación de Unión Fenosa, por causas que en la noche de ayer aún se desconocían, provocó una fuerte oscilación de tensión en toda la red. Como consecuencia, otra subestación clave para el suministro en el centro de Madrid, la que Iberdrola mantiene en la calle de Ayala, número 8, resultó afectada.

Un portavoz de Iberdrola explicó que los mecanismos de protección de la subestación funcionaron automáticamente, y uno de los dos transformadores de la subestación dejó de funcionar. Un total de 15.748 viviendas y comercios del barrio de Salamanca se quedaron sin suministro eléctrico. El servicio, según Iberdrola, se recuperó totalmente en sólo 34 minutos.

Hipótesis sobre las causas

Sobre las causas del incendio en la subestación, ayer sólo se podían hacer hipótesis. Según Unión Fenosa, la instalación era nueva, "del último año", y sus cinco equipos de transformación estaban a pleno rendimiento desde hace meses. En la subestación no se llevaban a cabo trabajos de mantenimiento. Fuentes de la empresa señalaban a última hora de ayer que el incendio parecía estar localizado en sólo uno de los cinco transformadores, considerados en general, máquinas muy seguras y de tecnología probada.

A diferencia del incendio registrado el pasado julio en la subestación de Mediodía (propiedad también de Unión Fenosa), donde el transformador que ardió tenía tensión, pero no carga, el registrado ayer se produjo con los transformadores a pleno rendimiento y, por tanto, con todos los aceites y elementos de refrigeración activos.

La investigación de las causas del incendio puede ser larga. De hecho, aún no se sabe a ciencia cierta qué sucedió en julio en la subestación de Mediodía, próxima a la glorieta de Atocha, aunque todo apunta a una mala conexión del transformador como desencadenante del incendio.