Homenaje
Esa obrita fue primero un cuento; el propio Chéjov, cuando se catapultó al teatro, lo adaptó para la escena en 1878. Desde entonces, todo primer actor ha querido interpretarlo; no todos con fortuna. Es el monólogo de un gran comediante vencido por la edad y por el alcohol, en el desolado escenario vacío donde se despide de la vida y del teatro ante su criado.
Emilio del Valle ha hecho una versión libre para dar a la obra una duración de casi dos horas. No es sólo la incorporación de personajes etéreos -una violinista, una joven actriz de expresión corporal, desnuda bajo una túnica translúcida-, sino añadidos de texto.
Manuel de Blas hace un esfuerzo considerable para componer el tipo y para darle en escena una sensación de veracidad. Al mismo tiempo, resulta un homenaje a la profesión teatral e incluso el posible canto del cisne de una forma de hacer teatro que se acaba, o se acabó hace tiempo.
El canto del cisne
De Anton Chéjov. Intérpretes: Juan Díaz, Manuel de Blas, Carolina Solas, Raquel Rivera. Compañía Producciones Inconstantes. Director y adaptador: Emilio del Valle. Sala Francisco de Rojas del Círculo de Bellas Artes. Madrid.
Acude el público, aplaude el público: a la idea del personaje, a Chéjov y a la interpretación de Manuel de Blas.