El flamenco tras un escaparate

Va a cumplirse un año desde que Paco Roji se lanzó a la "aventura-proyecto-locura", como él lo define, de abrir en Málaga una tienda especializada en el flamenco, una de las pocas de España. Roji escribe críticas y ha fotografiado a las principales figuras que pasaban por Málaga, retratos que ahora adornan su tienda. El empujón decisivo para embarcarse en este negocio lo recibió mientras trabajaba como educador social en el barrio de Los Asperones, una zona periférica y deprimida de la capital. "Fueron ocho años trabajando allí. Aprendí mucho sobre este mundo y me decidí a dar el salto", indica. Así nació Flamenca.

En esta tienda puede encontrar de todo, desde entradas para las actuaciones más relevantes que se van a celebrar en la provincia hasta los típicos souvenirs que abarrotan las tiendas más turísticas de la Costa del Sol. "Es un lugar donde se puede encontrar música más moderna, como Niña Pastori o Diego El Cigala, y también tradicional", cuenta Roji, que tiene en la venta de discos su mayor fuente de ingresos, pero que también oferta productos menos comerciales como antologías sobre el cante o biografías de los grandes maestros.

Lo que de verdad distingue a este establecimiento de otras tiendas de música es su vertiente como oficina de información. "Pregunté en el hotel dónde podía informarme sobre espectáculos flamencos en la capital y me dieron el nombre de esta tienda", señala Gustavo Marques, un mexicano que estos días recorre Andalucía junto con su mujer. "La mitad de mi clientela es nacional y la otra parte extranjera. Me he movido mucho entre los medios de comunicación, las agencias de viajes y la hostelería de la ciudad para dar a conocer los servicios que presta la tienda", indica Roji, que tilda de "satisfactorio" el año de vida de su comercio, pese a que se encuentra en unas galerías comerciales, Las Goya, poco conocidas hasta por los propios malagueños.

Roji elabora una cuidada selección de eventos que Flamenca se encarga de promocionar de forma altruista -"a veces les hago el negocio a otros", dice entre risas- entre los visitantes llegados a la capital y los aficionados al flamenco. Actuaciones en peñas, ciclos de baile, cante o toque o información sobre las escuelas donde poder aprender algunas de las artes del flamenco son algunas de las actividades de las que informa Flamenca, que cuenta además con una página web (www.flamenka.com). "Es una ayuda, porque entre el marasmo de espectáculos orientados al turismo se les brinda una selección de los más auténticos, de los que huyen del tópico y en los que actúan las figuras del momento", recalca Roji, que no sólo se ocupa de la difusión de espectáculos, sino que los organiza en su propio establecimiento o en otros con los que colabora.

En este año de vida, por el espacio abierto de Flamenca han pasado varias exposiciones. Además, Roji organiza todos los sábados ciclos en colaboración con el salón La Mesonera, uno de los establecimientos de calidad sobre el flamenco que quedan en la capital malagueña.