Sobre 'Matrimonio y homosexualidad' III

Desde que empecé mi licenciatura en ciencias físicas, en octubre de 1995, hasta el presente, a falta de pocas semanas para defender mi tesis doctoral, me he dedicado (y aún me dedico) a estudiar en profundidad las leyes de la naturaleza; mi buen expediente académico, las becas que he disfrutado, mis contribuciones a congresos y mis publicaciones internacionales avalan mi buen hacer en esta disciplina. Pues bien, a pesar de todo ello me veo obligado a reconocer que no entiendo muy bien a qué se refiere don Rafael Termes cuando justifica en base a la "ley natural" (sic) su rechazo a los matrimonios entre personas del mismo sexo.

En su artículo del 27 de octubre, don Rafael Termes dice, entre otras cosas, que "las unionesentre personas del mismo sexo no están en condiciones de asegurar la procreación". A partir de esta afirmación puede deducirse que la "ley natural" a la que se refiere don Rafael es la de la reproducción sexual; según ella, el matrimonio sólo estaría justificado para asegurar la supervivencia de la especie. ¿Debería entonces considerarse inmoral y peligroso para la sociedad (y prohibise, por lo tanto) el matrimonio entre un hombre y una mujer de 70 años?

Por otro lado, y ya que es tan habitual referirse a las leyes naturales en contraposición a las que crea el ser humano para regular la sociedad en la que vive, me gustaría recomendar la lectura del libro: Biological exhuberance. Animal homosexuality and natural diversity, escrito por Bruce Bagemihl, publicado por St. Martin's Press (New York) y favorablemente criticado en la prestigiosa revista científica Nature. El citado libro incluye un amplio catálogo de aves y mamíferos en los que se han observado todo tipo de comportamientos homosexuales: ritos de cortejo, muestras de afecto, relaciones sexuales, formación de parejas estables y cuidado de la prole por parejas formadas por individuos del mismo sexo. ¿Supone todo esto una violación de la "ley natural" a la que se refiere don Rafael Termes? ¿Estoy confundido y dicha ley sólo es aplicable al ser humano? ¿No estaríamos entonces ante una ley humana, de origen social y ajena a la naturaleza?

Creo que no debería utilizarse la naturaleza como comodín para validar posturas ideológicas.