El Barcelona, receloso

"No conozco a ningún equipo del mundo que no haya perdido nunca o caído en una eliminatoria. Tuvimos espíritu de equipo y jugamos bien. Son cosas del deporte que hay que soportar y aceptar". Frank Rijkaard, el técnico del Barcelona, lanzó ayer un mensaje de serenidad tras la derrota de los azulgrana en la Copa del Rey a pies de la Gramenet, de Segunda División B. El Barça, junto al Espanyol, lidera la triste lista de equipos que más veces (tres) han caído en la Copa en la primera ronda desde que se impuso en 2000 el sistema de partido único en ella. Pero ahora, lejos del dramatismo de las dos ocasiones anteriores, los azulgrana achacan su expulsión del torneo a "un accidente", producto de la mala suerte, y se amparan en que les avala su impresionante marcha en la Liga -líderes, con cinco puntos de ventaja sobre el Sevilla, segundo- y su buen papel en la Champions.

El vestuario quiere despejar las posibles dudas desatadas en el entorno ganando hoy en San Mamés al Athletic. Pese a su discreta clasificación, Rijkaard expresó, no obstante, el recelo que le despierta el equipo de Ernesto Valverde, al que ya ganó en la campaña pasada: 0-1. "Esa victoria forma parte del pasado y este estadio es siempre complicado", alertó el holandés; "el Athletic es uno de los equipos más fuertes por su sistema de juego y su organización. Sus ocho puntos no reflejan su potencial. Necesitan vencer y estamos avisados".

Rijkaard deberá seguir hoy con sus juegos malabares para hacer una alineación con una plantilla que se le cae a diario por culpa de las lesiones. Belletti, el ofensivo lateral derecho, no se ha repuesto de sus molestias en un tendón de Aquiles y dejará huérfana su banda porque no tiene sustituto natural: Gabri está roto para seis meses. La única opción es recurrir a Oleguer, que es central, o a un jugador del filial.

La defensa, la línea más sólida del Barça -sólo ha recibido tres goles-, sabe que está abocada a una prueba de fuego. La baja de Belletti ha recrudecido el debate sobre si el elenco -Rijkaard ha citado a 13 jugadores del primer equipo y cinco del filial- es demasiado corto. Los más optimistas sostienen que la caída en la Copa despejará el calendario y favorecerá el descanso. Pero no todos, empezando por los capitanes, lo ven así. Puyol, Xavi y Ronaldinho admitieron que, si ganan algún título, nadie se acordará de la Grama, pero que será al revés si se quedan en blanco.