Fortalecer a los andaluces
Andalucía necesita un nuevo liderazgo. Cuando en las instituciones democráticas el mismo partido político lleva más de 20 años en el poder, la alternancia es más necesaria que nunca. En Andalucía, la alternancia es una necesidad para la regeneración de la democracia en el mismo núcleo de nuestra Autonomía.
El congreso del PP-A es más importante que un congreso sólo imaginado en clave interna. Porque muy al contrario, esta cita se va a constituir en la antesala de un cambio de gobierno histórico en nuestra comunidad, con el liderazgo de Javier Arenas, un andaluz que ha demostrado sobradamente su capacidad y su andalucismo.
Cuando se nos encargó la ponencia del congreso llamada Fortalecer los ayuntamientos andaluces", sabíamos que la encomienda que se nos había dado era para fortalecer a los andaluces, y no para embarrarnos en un debate político o de confrontación. Los que nos sentimos andaluces no utilizamos a Andalucía, simplemente disfrutamos queriéndola. Por eso en el congreso presentaremos un trabajo hecho para los andaluces, para que la sociedad andaluza esté más fortalecida y ayudemos a los que más lo necesiten. Hemos preferido hacerlo así en lugar de dedicarnos a dividir, o a lanzar improperios al adversario político por puro deporte.
Frente al debate meramente retórico del PSOE sobre el modelo autonómico o territorial de Estado, que provoca problemas de territorialidad donde no los ha habido nunca, nosotros hacemos una propuesta de cohesión y de unión de todos los andaluces y en consecuencia de toda España. El modelo socialista es disgregador, separa y provoca problemas; está hecho para debates exclusivamente políticos, y no piensa en el ciudadano. Nuestro modelo une a la sociedad y está hecho no para intereses políticos, sino directamente vinculado al bienestar de los andaluces. En la ponencia Fortalecer los ayuntamientos andaluces explicamos que si el resto de administraciones del Estado apoyan a los ayuntamientos andaluces, el efecto será que los ciudadanos andaluces habremos salido más fortalecidos que nunca en el ámbito social. Por eso también queremos que los ayuntamientos andaluces puedan participar con voz en el Senado. Con ello habremos contribuido a que en el foro territorial por excelencia, como es la Cámara alta, los ayuntamientos andaluces puedan exponer sus problemas y buscar soluciones en el marco de un debate tranquilo y sin estridencias, que sólo busque lo mejor para el ciudadano.
Es necesario un gran acuerdo en el ámbito local, para aumentar la autonomía financiera de los ayuntamientos andaluces. Esto lo tiene claro todo el mundo, lo que pasa es que la Junta de Andalucía se niega en redondo a perder capacidad financiera y cederla a los ayuntamientos. Esto no es un problema menor, porque son muchos los municipios andaluces que no pueden atender servicios sociales, educativos, sanitarios o de infraestructuras que son básicos para el ciudadano, que dependen de la Junta pero que ésta no financia o tarda mucho en financiar. Es lo que hemos denominado en la ponencia como "una herida en el Estado del Bienestar proclamado en nuestra Constitución". Esa herida se ha acumulado en forma de otra deuda histórica, esta vez provocada desde la Junta hacia los ayuntamientos andaluces, que han tenido que soportar servicios públicos como podían y sin tener una financiación para ello. Y es que, efectivamente, es el ciudadano andaluz el que paga las consecuencias de un sistema de financiación local que hay que resolver, porque lo más grave es que si los servicios sociales básicos de una ciudad se prestan de prestado, entiéndase la redundancia, quienes salen más perjudicados son los ciudadanos andaluces más necesitados y eso hay que arreglarlo como sea.
La solución la damos en la ponencia con un pacto local y con la segunda descentralización. El Pacto Local andaluz es algo que suena complicado, pero en realidad lo que significa es un gran acuerdo entre las administraciones para curar la herida que existe en el Estado del bienestar; es por tanto un gran acuerdo para la convivencia de los ciudadanos. La segunda descentralización consiste en reconocer los servicios que ya están prestando los ayuntamientos y transferir competencias y dinero para prestarlos bien y con calidad, para que los ciudadanos andaluces que más necesitan estos servicios sean tratados con las garantías que marcan los derechos constitucionales.
Es necesario por tanto que la comunidad autónoma estabilice la balanza y transfiera autonomía financiera a los ayuntamientos, que pueden asumir a su vez un principio de corresponsabilidad fiscal con los objetivos marcados para satisfacer las demandas de todos sus ciudadanos. Se hace necesario un marco estable con unas reglas del juego claras, para que todos los ayuntamientos andaluces, independientemente del signo político que sean en un momento determinado, puedan atender a los ciudadanos andaluces. Por eso proponemos el aumento de los fondos de nivelación y cooperación y que los ayuntamientos puedan acceder a los ingresos de la comunidad autónoma con un porcentaje cercano al 5%.
El periodo para llevar a cabo esta revolución normativa para fortalecer a los andaluces es idóneo, pues en estos momentos se debate la reforma del Estatuto de Autonomía. Es ahí donde se tienen que establecer esas reglas de juego claras, de manera que nunca se primen intereses políticos en el desarrollo de las trasnferencias a los municipios, y exista un marco estable dedicado a servir sólo a los intereses de los andaluces.
Carlos Rojas es diputado autonómico del PP por Granada y ponente en el 11º Congreso regional.
