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Entrevista:Pilar Bardem | Actriz

"Mi sueño y mi realidad son mis hijos"

Aurora Intxausti

Se ha metido en la piel de María Zambrano y ha dejado que sus palabras saliesen fluidas de sus labios. Pilar Bardem (Sevilla, 1939) presenta hoy en la sección oficial de la Seminci de Valladolid María querida, dirigida por José Luis García Sánchez y con guión de Rafael Azcona y basada en parte de la vida de la filósofa malagueña. Emocionada, dice que el papel para ella ha sido "un verdadero regalo". Suena el teléfono móvil con el himno de Riego mientras pasea por el Retiro, lugar en el que ha pasado gran parte de su vida, y confiesa: "Soy de izquierdas y republicana".

Pregunta. La vida de María Zambrano estuvo llena de palabras. ¿Cómo ha logrado poner voz a su filosofía?

Respuesta. He prestado la voz y, sobre todo, un amor inmenso para sacar adelante a este personaje. El trabajo de García Sánchez como director y de Azcona como guionista es muy hermoso porque han hilado una historia donde se puede contar con numerosas palabras la vida y la filosofía de esta mujer casi desconocida, incluso para mí. Somos muchos los que tenemos un gran desconocimiento sobre esta mujer y, sobre todo, de su obra. Yo sabía de la existencia de María Zambrano y de su filosofía, pero no la conocía en profundidad. Para mí este papel ha sido un verdadero regalo.

"He prestado la voz y, sobre todo, un amor inmenso para sacar adelante al personaje de la filósofa malagueña María Zambrano"
"Más pena me da a mí, que soy de izquierdas, que Fidel Castro haya convertido la revolución cubana en una dictadura"
"El hecho de amar a mis hijos sobre todas las cosas no me ha hecho renunciar a amar y ser amada. Hay una parte que ellos jamás podrán ocupar"

P. En la República en España hubo muchas mujeres que lucharon por conseguir algunos de los derechos que hoy tenemos. ¿Qué ha aprendido de María Zambrano?

R. Con esta película se podría iniciar un proceso de recuperación de memoria histórica. No sólo de la Zambrano, sino también de otras mujeres que lucharon por la República. Habría que hacer un gran homenaje a todas aquellas, conocidas y desconocidas, que defendieron la legalidad, el sistema de gobierno establecido, y la libertad que permitió luego avanzar en algunos derechos desconocidos hasta aquel momento.

P. ¿Por qué cree que este país ha perdido la memoria histórica?

R. Los que tuvieron que hablar, los que tenían voz era la gente del exilio que nunca reivindicó y se corrió un tupido y estúpido velo para tratar de olvidar el sufrimiento. Ya somos todos mayores y no es necesario que nadie se justifique. Todos sabemos que hubo gente que defendió la legalidad y hubo otra gente que dio un golpe de Estado y fueron los que estaban con Franco. La transición española ha sido modélica porque mucha gente de la izquierda dejamos pasar las cosas. Siempre fue desde la izquierda desde donde se pidió la reconciliación del país porque la derecha nunca se reconcilia con nadie, siempre han considerado que están en posesión de la verdad.

P. Su vinculación a la política ha sido permanente. Hace año y medio encabezó manifestaciones contra de la guerra de Irak.

R. No me imaginé que tuviera que volver a una manifestación. Fue emocionante, a pesar de que dimos la cara y nos la partieron y nos la siguen partiendo con referencias despectivas. Fuimos unos ciudadanos que hicieron en España lo que millones de ciudadanos en todo el mundo estaban haciendo, y diciendo que esa guerra era ilegal y que no se podía invadir Irak. Se tergiversaron las cosas y nos acusaron de defender a Sadam, y eso era mentira. Nadie defiende a un dictador, nadie defiende a Fidel Castro. Pero no por ello se puede decir que se desee su muerte, como lo acaba de hacer Loyola de Palacio. Lamentablemente, más pena me da a mí, que soy de izquierdas, que Fidel haya convertido la revolución cubana en una dictadura. Más lo siento yo que los que siempre se han opuesto a Castro.

P. ¿Qué espera del Gobierno socialista?

R. Que no nos falle. No he militado en ningún partido, y ahora tampoco; apoyo al señor Zapatero y le felicito por haber traído las tropas de Irak, por haber aprobado la ley de violencia de género y por permitir el matrimonio entre los homosexuales, pero todavía tiene muchas cosas por hacer y muchas cosas que superar. Lo bueno es que le dejasen de 8 a 10 años para que demuestre lo que vale; vamos a darle un voto de confianza. Hasta ahora lo que hemos conseguido es que haya menos crispación y mejores modos.

P. Desde joven se quedó con tres hijos pequeños que tenía que mantener y trabajar duro. ¿Renunció a muchos sueños para ello?

R. No. Siempre he tenido los pies en la tierra, aunque la cabeza muy alta para ver el horizonte. Mi sueño y mi realidad han sido mis hijos, y por ello no he tenido que renunciar a nada. Todo lo que he hecho estaba bien hecho por ellos y para ellos. Y sigue siendo por ellos y para ellos, aunque ahora he añadido a Pablo, mi nieto de tres años y medio. La maternidad, como el sacerdocio, es in eternum. Se es madre hasta más allá de la muerte. De hecho, yo a mi madre muerta la sigo sintiendo todos los días.Me siento profundamente orgullosa de mis hijos y les agradezco que sean buenas personas.

P. Javier Bardem, su hijo, ha logrado este año la Copa Volpi por su papel en Mar adentro y ha estado rozando el oscar, ¿qué sintió cuando le vio interpretando a Ramón Sampedro?

R. Cuando vi el primer pase de la película fue tal el impacto que no sabía cómo calificarla. A mi hija, Mónica, le costó un ataque de ansiedad. La he visto ya cuatro veces y es una película que cada vez que la ves te gusta más. Amenábar, ese puto genio, como yo le digo, ha hecho una película impresionante. El trabajo de Javier me parece asombroso porque, aparte del dolor físico que supone someterse al maquillaje o estar encorvado, ha sabido transmitir con la voz, el poco gesto de su cara y con la mirada algo que me parece de una gran riqueza.

P. ¿Selecciona su hijo mucho los trabajos?

R. Es su carrera y yo no me puedo meter, pero es un hombre que cuida sus papeles y trata de encontrar personajes con los que arriesgar cada vez más, y no es tan fácil. No todos los días se tienen personajes maravillosos y hay que vivir de esto.

P. En María querida, Zambrano dice que se puede llegar a vivir del amor sin amante. ¿Comparte con ella este planteamiento?

R. La Zambrano hablaba de un amor total. El hecho de amar a mis hijos sobre todas las cosas no me ha hecho renunciar a amar y ser amada. Hay una parte que jamás podrán ocupar ellos.

P. En su trayectoria profesional ha diversificado su trabajo en diversos géneros: teatro, televisión, cine. ¿Qué la satisface más?

R. Los actores hablamos del teatro, de su magia, del contacto con el público. La verdad es que no es tan cierto. En el teatro las emociones están a flor de piel y se nota que el público está a tu lado tanto en la risa como en el llanto, pero la magia del teatro es que no deja huella. Cada función es distinta y no hay prueba fehaciente de lo que has hecho o dejado de hacer. El cine necesita una concentración asombrosa y la televisión es rapidez mental, de usar y tirar. Lo mejor es que ejerces una profesión que te gusta y te pagan por ello.

P. Ha puesto rostro y voz a la Mesa Antipiratería.

R. Es una lucha a largo plazo porque la gente está confundida. Cuando se compra en la manta no se apoya al inmigrante y se jode a la multinacional, sino que se pierden puestos de trabajo y se impide que las empresas, que siempre ganan, destinen los beneficios a la inversión en nuevos talentos y proyectos diferentes.

Pilar Bardem, ayer por la mañana en el Retiro madrileño.
Pilar Bardem, ayer por la mañana en el Retiro madrileño.ULY MARTÍN
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Sobre la firma

Aurora Intxausti
Coordina la sección de Cultura de Madrid y escribe en EL PAÍS desde 1985. Cree que es difícil encontrar una ciudad más bonita que San Sebastián.

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