Un ajedrecista a dieta

Paco Vallejo, de 22 años, ex campeón del mundo sub 18 de ajedrez, se encontraba espeso de cuerpo y mente y afrontó varios cambios: empezó a jugar al pádel y a caminar todos los días, redujo al mínimo las proteínas de origen animal y eliminó la siesta antes de las partidas. Los resultados son formidables: cuatro victorias y un empate en cinco partidas de la Olimpiada de Calviá (Mallorca), donde España se afianzó anteayer como aspirante al podio: quinta e invicta, entre 128 países, tras seis rondas de las 14 previstas.

"Mi éxito debe estar conectado con los siete kilos que he perdido en los últimos meses porque no se me ocurre ninguna otra razón que lo justifique", explica el menorquín (1,92 metros de estatura, 93 kilos de peso), que abandonó la carrera de Educación Física hace tres años para ser sólo ajedrecista profesional. Nunca ha dejado de progresar en el escalafón mundial (26º), pero no tan rápido como se esperaba de quien está ganando medallas en los Mundiales de su edad desde que tenía nueve años. Le falta un gran salto para meterse entre los diez mejores.

"Es más una cuestión de disciplina que de sacrificios porque hacer ejercicio siempre me ha gustado. Lo de convertirme en casi vegetariano tiene varias causas. Siento cierto rechazo a que se maten animales para que yo pueda comer, he leído algún libro al respecto y, sobre todo, he llegado a la conclusión de que rindo más en los torneos si como ligero y no me echo la siesta", añade Vallejo, a quien tal vez le haya influido entrenarse a menudo con el indio Viswanathan Anand, vegetariano y número dos mundial.

Varias de las partidas de Vallejo en la Olimpiada, especialmente una bellísima contra el lituano Rozentalis, han dado la vuelta al mundo a través de Internet. Su actuación es el motivo principal de que España haya llegado al descanso de ayer tan cerca del podio tras ganar en la víspera a Francia por 2,5 a 1,5 puntos. Pero no el único: el nacionalizado Alexéi Shírov firmó dos impecables victorias el miércoles y el martes tras un comienzo titubeante.

España alineó por primera vez a su equipo de gala (Shírov, Vallejo, Illescas y Cifuentes, con Romero y Arizmendi de suplentes) tras la incorporación de Miguel Illescas, analista del ruso Vladímir Krámnik, quien acaba de revalidar su título de campeón del mundo en Brissago (Suiza). Illescas restó importancia a su desgaste físico: "Los días que llevo sin dormir a pierna suelta forman parte del secreto del sumario. Pero he aprendido mucho con Krámnik y mañana podré descansar".

La Olimpiada se disputa por el sistema suizo, que tiende a enfrentar a equipos con similar puntuación de modo que el rival sea más fuerte cuanto más alto se suba en la tabla. Rusia, sin Gari Kaspárov ni Krámnik, sufre como la selección de baloncesto de Estados Unidos en los Juegos Olímpicos de Atenas sin sus grandes estrellas: el lunes perdió ante Ucrania (1,5-2,5), cuyo equipo incluye al prodigioso Serguéi Kariakin, de 14 años.

Clasificación: 1. Ucrania, 19 puntos. 2. Rusia, 18. 3. India y Bulgaria, 17. 5. España, Israel, Azerbaiyán y Armenia, 16,5

(más información: www.36chessolympiad.com)