Un hombre fallece tras ser disparado por la espalda en Rincón de la Victoria

José Antonio O. S., de 35 años, murió la madrugada de ayer en Rincón de la Victoria (Málaga) tras recibir dos disparos por la espalda. José Antonio trabajaba como portero de una urbanización aunque no tenía permiso de vigilante. El Cuerpo Nacional de Policía asegura que el fallecido tenía antecedentes penales por homicidio, extorsión y tráfico de drogas y apunta a que el asesinato se debió a un ajuste de cuentas.

Cerca de la medianoche del jueves, José Antonio recibió dos disparos con una escopeta de postas. Su asesino le disparó por la espalda. La munición le alcanzó en la zona lumbar, cerca de los riñones. Los vecinos de la urbanización Añoretas escucharon los disparos y avisaron a la Guardia Civil y a la policía local de Rincón de la Victoria. Cuando los agentes llegaron, José Antonio yacía ensangrentado en el suelo y su caseta de vigilante estaba completamente revuelta, según fuentes policiales. José Antonio fue atendido por el 061 pero murió poco después.

La Guardia Civil organizó un dispositivo de búsqueda en la carretera para intentar localizar a los autores del asesinato. Poco después, en la carretera nacional 340, a la altura del cruce con la carretera de Cájiz, (Vélez-Málaga) un vehículo negro huyó de un control policial a gran velocidad. La policía pensó que se trataba de los autores y los siguió. El coche apareció junto a una caravana en la zona de Bajamar, de cuyo interior se bajaron un hombre y una mujer de nacionalidad británica. Los dos fueron detenidos y llevados a comisaría.

En un principio, el Cuerpo Nacional de Policía pensó que podían ser los asesinos pero la hipótesis perdió fuerza ayer. "No está claro que fuesen ellos. Creemos que se trata de un ajuste de cuentas porque el fallecido tenía antecedentes por extorsión, homicidio y tráfico de drogas", según fuentes policiales.