_
_
_
_
_

Un hombre fallece en Arcos tras recibir un disparo fortuito en un ojeo de perdices

José Fernández Toledo, vecino de Arcos de la Frontera (Cádiz) de 64 años, falleció ayer tras recibir un disparo de escopeta de caza en el tórax en el transcurso de un ojeo de perdices. Los hechos tuvieron lugar poco antes de las diez de la mañana en la finca El Barranco, ubicada entre los municipios de Arcos y El Bosque, como consecuencia de un disparo fortuito efectuado por uno de los cazadores, un súbdito inglés de 58 años, cuya identidad no ha trascendido. El fallecido, que actuaba como secretario de uno de los puestos del coto de caza y hombre muy conocido en la zona, fue trasladado con toda urgencia al centro médico de la localidad arcense muriendo poco después de ingresar debido a una fuerte hemorragia y a la gravedad de las heridas provocadas por el disparo.

Agentes del puesto principal de la Guardia Civil en Arcos de la Frontera, el juez de guardia y un médico forense se trasladaron al centro sanitario donde, sobre la una de la tarde, se procedió al levantamiento del cadáver y su posterior traslado al hospital Virgen de las Montañas de Villamartín para la práctica de la autopsia. Aunque no han trascendido los detalles concretos del suceso, se sabe que el disparo se produjo de forma fortuita e inesperada por lo que el autor del mismo no fue detenido ni ha sido objeto de ninguna diligencia. No obstante, este ciudadano inglés no podrá abandonar nuestro país en los próximos días sin el permiso expreso del juez encargado del caso. El entierro de José Fernández Toledo, quien llevaba gran parte de su vida dedicado al negocio de la caza, tendrá lugar hoy en el cementerio de Arcos.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_