Manises, a la espera de un nuevo despegue
Aunque es difícil situar en un cajón estaco al público que recurre a estos vuelos, ya que las fuentes consultadas hablan de un abanico que va desde el cliente más joven a familias y personal en viaje de negocios, varios expertos mencionan que las aerolíneas de bajo coste estimulan la demanda.
El delegado de Alitalia, Andrea Gabrielli, en este sentido, reconoce que estas empresas "generan un tráfico nuevo" de gente que nunca cogería un avión si no fuera tan barato. "Creo que se está creando un nuevo tipo de pasajero", resume. Por ello, en general, opina que aunque seguramente les reste algo de cuota de mercado -"no mucha", asegura-, en principio se estimula el mercado.
Los usuarios más comunes son el público joven, que en muchos casos no ha cogido nunca el avión, aunque el abanico de clientes se diversifican cada vez más y también se contratan estos vuelos
para viajes de negocios, reconoce Vicente Blasco, presidente de la Asociación Empresarial de Agencias de Viajes de España (Aedave) en la Comunidad Valenciana.
Con todo, en el sector no se pierde de vista que a este goteo en el anuncio de rutas le seguirá una futura reordenación. El representante de Ryanair, Alfons Chaver, se muestra convencido de que con el tiempo habrá una criba porque algunas compañías se están solapando. También está convencido de que este invierno puede desatarse una auténtica "guerra" de precios.
Vueling, que empezó a operar desde Manises a principios del pasado mes de julio, viaja en la actualidad desde Valencia a Palma de Mallorca, Bruselas y París. Su director de Marketing y ventas, Victor Bañares, también considera que "habrá una reordenación de rutas y de operadores por ruta".
En la otra cara de la moneda, las compañías clásicas se han visto obligadas a revisar de arriba abajo toda su política comercial con la llegada de las low cost.
El delegado de Alitalia, Andrea Gabrielli, achaca el aumento de oferta en aeropuertos como Valencia a la saturación de las instalaciones tradicionalmente turísticas. "El panorama ha cambiado en un año en Valencia", reconoce Gabrielli, que insiste en la apuesta de Alitalia por la capital del Turia. Desde principios del próximo mes de noviembre dispondrá de un vuelo diario a Roma, que sustituirá a uno de los dos diarios que la compañía realiza entre Valencia y Milán. "No nos asustamos", dice el ejecutivo en alusión a las aerolíneas de bajo coste. "Intentamos responder ofreciendo producto". En el haber de las compañías convencionales destacan las mayores garantías que ofrece su producto a los viajeros ante eventuales complicaciones.
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