Despedida de Martínez
Próximamente tomará la alternativa el tapatío Guillermo Martínez y en su despedida como novillero el pasado domingo se le apreciaron madurez y buenas maneras. Con gallardía veroniqueó al áspero primero. Sin amilanarse por el fuerte viento que soplaba, bajó las manos y ejecutó con soltura su trasteo. Haciendo honor a su nombre de Ciclón, el burriciego cuarto acudía de largo, a gran velocidad y a oleadas. Ante esta situación, llevó al manso perdido a tablas y ahí lo paró y sometió.
En el segundo de la tarde, el público fue tolerante con Luis Alberto Vázquez. Bregando, recibió a su oponente. En su muleteo el fuerte viento lo descubrió y fue enfrontilado, afortunadamente sin consecuencias. Aunque acortó las distancias, se ciñó y lo aguantó, no estuvo por encima de la nobleza de la res. Pero en el quinto la concurrencia tomó partido por un espontáneo y en represalia le exigió a Vázquez, quien fracasó rotundamente ante el noble burel.
San Marcos / Martínez, Vázquez, Solís
Novillos de San Marcos: justos, encastados y bravos, salvo 1º y 4º. Guillermo Martínez: despedida: aviso y silencio; al tercio. Luis Alberto Vázquez: segundo aviso y silencio; segundo aviso y pitos. Jacobo Solís: al tercio; aviso y silencio. Monumental Plaza México. 3 de octubre. 5ª novillada. Mala entrada.
Frente al noble tercero, Jacobo Solis con quietud demostró valor, pero un desconocimiento total de la técnica. Eso sí, equivocó a los tendidos, que se emocionaron con su destoreo. En el bravo sexto, sin importarle los golpes que recibió en la rodilla izquierda al darle de hinojos un farol, con bríos volvió a quedarse quieto, pero su muleteo fue rápido y vulgar. Total, desperdició la calidad de sus enemigos.
Babelia
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