La hora de la verdad
Valencia, candidata a los Mundiales de atletismo de 2009, será evaluada por la federación internacional en noviembre
Fue durante una mañana soleada en el viejo cauce del río Turia; o quizá en medio de un almuerzo. El caso es que el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, recogió el guante que le lanzó Rafa Blanquer, ex atleta y actualmente uno de los entrenadores más prestigiosos del atletismo español; también buen amigo del jefe del Consell, amante del deporte, del fútbol y el atletismo. En aquel encuentro, uno de tantos entre ambos, Blanquer propuso: "¿Por qué no impulsamos la candidatura valenciana a los Mundiales de atletismo de 2009? Es un deporte popular, una de las competiciones más atractivas de cuantas se celebran en el mundo. Y el retorno del gasto está garantizado". Encantado, Camps le dijo que adelante, que había que echar el resto, preparar un informe como Dios manda que reflejara las excelencias de Valencia, la bonanza de las temperaturas, su red hotelera, sus instalaciones deportivas... Sólo había una pega, y vaya pega: la ciudad carecía de un estadio preparado para albergar una competición de ese tipo; carecía del estadio del que presumían, por ejemplo, los berlineses, que optan a los Mundiales por segunda vez consecutiva, que tienen un recinto histórico, el mismo donde el mítico Jesse Owens cimentó su leyenda en los Juegos Olímpicos de 1936 ante Hitler.
Valencia carece del estadio del que presume, por ejemplo, Berlín, otra aspirante
Pero Valencia, lejos de arredrarse, se aventuró. Se involucró el Consell, el Ayuntamiento, aún eufórico por la designación de la ciudad como sede de la Copa del América de vela, la federación valenciana, con su presidente, Juan de Dios Leal, a la cabeza. La estrategia consistía en convencer a la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) de que ninguna otra aspirante -Berlín, Bruselas y Split- podía ofrecer lo que Valencia ofrecía: varias instalaciones atléticas (el Palau Luis Puig, las pistas del viejo cauce, las del colegio San José; todas remodelada para la ocasión) en un radio de dos o tres kilómetros alrededor del futuro estadio, que se construiría en un solar municipal en la pista de Ademuz; que Valencia tenía la ventaja de poder construir la instalación a la medida de la competición...
Ahora, la candidatura valenciana ultima todos los detalles para recibir a la delegación de la IAAF, que llegará el próximo noviembre para evaluar la ciudad, que, de llevarse el gato al agua, deberá de concretar partidas presupuestarias al respecto. Esa visita es crucial. La impresión que se lleve la comitiva, diez de los 26 miembros del comité ejecutivo de la federación internacional, será clave en la elección, el próximo 5 de diciembre en Helsinki.
Para reforzar su candidatura, Valencia es una de las tres aspirantes a organizar en 2005 la Copa de Europa de clubes, la llamada Champions del atletismo continental. Sus rivales son Atenas y Roma. En caso de ser elegida, las instituciones públicas deberán remodelar la pista del viejo cauce.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.