El Gobierno niega que su salida de Euskaltel se deba al recurso de Telefónica

El Ejectivo vasco negó ayer taxativamente que la decisión, aprobado el pasado martes por el Consejo de Gobierno, de vender el 3% del capital social de Euskaltel guarde relación alguna con el recurso administrativo que Telefónica ha interpuesto contra el concurso público para la prestación de servicios de telecomunicaciones por valor de 65,4 millones. Telefónica justifica el recurso porque el pliego de condiciones elaborado por el Gobierno no tiene claramente definidos los criterios de adjudicación y deja, a su juicio, excesivo margen a la discreccionalidad. Al concurso sólo se han presentado Euskaltel y Telefónica, ya que el tercer operador que podría haber pujado, Vodafone, no presta servicios de telefonía fija. "La salida del accionariado no tiene nada que ver con ni con el concurso ni con el recurso", dijo ayer un portavoz oficial de Vicepresidencia. El Gobierno tiene hasta la primera semana de octubre para responder al recurso.

Sin embargo, las compañías que compiten con Euskaltel creen que no es jurídicamente sostenible que el Gobierno vasco sea "juez y parte" en la adjudicación del concurso. Aunque haya anunciado su venta, el Ejecutivo vasco tiene todavía un 3% directo en el capital de la operadora vasca y la vicelehendakari y consejera de Hacienda y Administración Pública, Idoia Zenarruzabeitia, que es el departamento responsable de elaborar el pliego de condiciones del concurso y de adjudicarlo, está en el Consejo de Administración de Euskaltel. De hecho, el Gobierno vasco tiene dos consejeros, la propia Zenarruzabeitia y Sabin Intxaurraga, pero además cuenta con una participación indirecta de otro 7% a través de EITB (5%) y el Ente Vasco de la Energía (2%), con al menos dos miembros más en el máximo órgano de la operadora.

Salida del consejo

Los dos miembros directos saldrán del Consejo de Administración en el momento en el que la venta del 3% del capital social se haga efectiva. El consejo ha comunicado a sus principales socios que esta disponible ese paquete por si quieren ejercer su derecho preferencial de compra. El Gobierno sostiene que cuando entró en el capital social de Euskaltel ya dijo que iba a estar unos cinco años y que después vendería. "Es lo que hemos hecho ahora", indicó un portavoz.

El contrato por el que pujan Euskaltel y Telefónica repite la puja de hace seis años, cuando las dos empresas compitieron por conseguir las telecomunicaciones de la Administración pública vasca. Entonces Telefónica fue excluida por ofrecer tarifas más bajas a las fijadas por el Boletín Oficial del Estado.

En esta ocasión se trata de un contrato para cuatro años, prorrogable a dos más. Incluye en un paquete global los servicios de telefonía fija, móvil, datos e Internet del Gobierno vasco y es extensible a Osakidetza, Justicia y la red educativa.

El concurso no establece una fecha tope para la adjudicación del contrato, por lo que podría darse la circunstancia de que hubiera consejeros del Gobierno vasco en Euskaltel cuando decida la adjudicación.