El PSPV insiste en que el parque de cabecera incluye una zona comercial

La concejal del PSPV en el Ayuntamiento de Valencia Carmen del Río afirmó ayer que la zona comercial prevista en el Parque de Cabecera "existe", y señaló que el problema es saber si ésta "coincide con el objeto inicial del contrato", según informa Efe. Del Río explicó que antes de finalizar el mes de septiembre, Rain Forest Valencia, empresa adjudicataria de la gestión del parque, deberá presentar los proyectos de ejecución de las fases 2, 3 y 5 del mismo, de manera que se conocerá lo previsto en la segunda de ellas. Destacó que en esta fase, que ocupa 37.000 metros cuadrados, es "donde está el problema" porque no está bien definida ya que "sólo se tiene una indicación de un centro de ocio de tiendas, pero no sabemos de qué dimensiones".

Del Río aseguró que el concejal de Grandes Proyectos, Alfonso Grau, se contradice ya que, según ella, primero dijo no conocer ninguna propuesta de Rain Forest para la construcción de un centro comercial y luego aseguró haber recibido un proyecto pero haberlo rechazado.

Por su lado, Grau negó que se proyecte un centro comercial en el parque de cabecera y calificó de "mentira" las declaraciones de Del Río, a quien acusó de "repetir la misma mentira varias veces, vertiéndola sobre este importante proyecto para la ciudad".

Policía y extrema derecha

Por otra parte, la también concejal socialista Vicente Lloris acusó a la alcaldesa, Rita Barberá, de "consentir la relación de altos cargos de la Policía Local con la extrema derecha valenciana". Lloris se refería a dos dirigentes policiales que recientemente han impartido cursos de formación en las dependencias de la empresa de seguridad privada Levantina de Seguridad, "vinculada a un dirigente de la extrema derecha local y conocida en la ciudad por las numerosas denuncias a las que ha tenido que hacer frente en relación a actuaciones violentas". La edil recuerda que el propietario de Levantina, José Luis Roberto, es también "el principal dirigente del partido España 2000, formación política que ha protagonizado durante los últimos años diversas actuaciones xenófobas en el barrio de Russafa". Y añade: "Si la alcaldesa desconocía los vínculos de estos cargos policiales con la citada organización es que no tiene ningún control sobre la gestión del concejal Miquel Domínguez o, por el contrario, que simpatiza con la filosofía en materia de seguridad del señor Roberto que, al parecer, es la misma que la de Domínguez".

El edil popular replicó que la Policía Local "no tiene ninguna vinculación con estos cursos, ni en la confección de la programación, ni en la organización ni elección del profesorado" y recordó que "no es necesario solicitar permiso alguno para que un sindicato pueda dar cursos de asistencia voluntaria y homologados por el Instituto Valenciano de Seguridad Pública".