_
_
_
_
Crítica:
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Nostalgia

Había nostalgia por ver en qué se habían convertido las canciones de Jesús de la Rosa al cabo del tiempo. Nostalgia relativa, pues la mayor parte del público ni sabía de qué iba el grupo Triana ni cuál había sido su peripecia humana. Pero sí había otro grupo de enterados, a quienes el acontecimiento motivaba especialmente, y que se sintieron más implicados en lo que veían.

Lo que veían. Un fondo de escenario con todos los músicos y bailarines que entraban, bailaban y salían. Nada más, salvo un diorama en que se proyectaron algunos vídeos alusivos. Los músicos hacían versiones aflamencadas de algunos de los grandes éxitos de Triana, bajo la dirección de Ricardo Rivera. Versiones ajustadas al modelo original, en que los compases flamencos sin embargo dejan su huella profunda y marcan la pauta a los bailarines. La pauta a la que ajustarán su danza, a veces con profundidad notable. Las canciones de Triana tienen, pues, una nueva lectura, en ocasiones más superficial, como si no quisieran alejarse mucho de su marca original; a veces mucho más profunda, y entonces la flamencura parece de nuevo cuño y les da casi la condición de otras creaciones, como en los martinetes, la farruca o la nana por poner unos ejemplos.

Triana. 'En el nombre de la Rosa'

Compañía de Danza de Javier Latorre. Teatro Lope de Vega, Sevilla, 23 de septiembre.

Es en estas donde la labor de los bailarines adquiere mayor plenitud. Los bailarines evolucionan -en toda suerte de combinaciones, desde el formato individual hasta el pleno a ocho- y lo hacen con convicción y entrega, marcando excelentemente las diferencias entre uno y otro palos flamencos. Y hay momentos de gran belleza, en un espectáculo que va gradualmente, sin un respiro casi, de menos a más. Es la magia del poder evocador de una música que en su tiempo pudo tener un mayor o menor impacto en la juventud, pero que hoy revive gracias a esta nueva encarnación que le ha dado Javier Latorre.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_