_
_
_
_
AJEDREZ

El fogonazo de Volokitin

Blancas: Nataf. Negras: Volokitin. Defensa Siciliana. Budva (Serbia y Montenegro), 10 de septiembre de 2004.

El ucranio Andréi Volokitin, de 18 años, no fue un niño precoz tan deslumbrante como sus compatriotas Ruslan Ponomáriov y Serguéi Kariakin, pero su gran calidad está fuera de toda duda, como se aprecia en esta joyita. 1 e4, c5 2 Cf3, e6 3 d4, c - d4 4 C - d4, a6 5 Ae2, Dc7 6 0-0, Cc6 7 Cc3, b5 8 C - c6!, d - c6 9 a4, b4 10 Cb1, Cf6 11 Ad3, h5! (¡una jugada con mucha enjundia! Se amenaza Cg4, así como el avance h4-h3 para debilitar el enroque, y las blancas deben tener mucho cuidado) 12 h3, Ac5 13 De2? (esta jugada, de apariencia sana e inocente, es quizá el único error de Nataf, como pronto veremos. No valía 13 Rh1 por 13... Cg4 14 f4, Cf2+ 15 T - f2, A - f2; sí podía jugarse 13 Cd2, Cg4 14 Cf3, a pesar del molesto caballo instalado en g4; y quizá lo mejor fuera 13 Df3, para contestar a 13... Cg4?! con 14... Af4!) 13... Cg4! 14 h - g4, h - g4 15 e5 (diagrama) (la idea de De2 era apoyar este avance, que cierra la diagonal b8-h2. Y ahora, con una pieza menos, ¿qué pueden hacer las negras? 15... f5!! (¡magnífico! Se amenaza llevar la dama al ataque con Df7-Dh5, o bien con g5 y Dh7) 16 g3?!, Df7 17 Ag5 (única defensa) 17... Dh5 18 Ah4, g5 19 A - f5 (había formas de garantizar una larga agonía, como 19 Rg2, g - h4 20 Cd2, y ahora, en lugar de 20... h - g3?, que no vale por 21 Th1, las negras jugarían, por ejemplo 20... Ab7, con un peón de más y mucho ataque) 19... e - f5 20 Dc4, g - h4 21 D - c5, Ab7! (la sencillez de este lance es tan grande como su eficacia) 22 Dd6, Th6 23 e6, Td8 24 Dc7, h - g3, y Nataf se rindió, dado que el final resultante tras 25 Df7+, D - f7 26 e - f7+, R - f7, sería desesperado para las blancas.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_