Un hombre muere acribillado a balazos en Hortaleza cuando caminaba cerca de la A-2

Nueva muerte a balazos en la capital. Un español de 38 años, Jesús Manuel Paz Romero, fue acribillado a balazos ayer por la tarde mientras caminaba por un descampado cercano a la autovía de Barcelona (A-2), en el distrito de Hortaleza. Tres individuos montados en un turismo de color negro dispararon una ráfaga de tiros, de los que cinco le alcanzaron en el tórax y en el cuello. Esto le causó la muerte prácticamente en el acto. El fallecido tenía antecedentes por tráfico de drogas. Este asesinato eleva a 44 los homicidios registrados en la región desde que comenzó el año.

Los hechos ocurrieron a las 19.18 en la calle de las Peonías, una vía con doble sentido de circulación junto a la desviación de la autovía de Barcelona hacia los recintos feriales de Ifema y la avenida del Veinticinco de Septiembre. Jesús Manuel Paz caminaba hacia la avenida de los Andes. Según diversos testigos, iba bien vestido. Llevaba una camiseta tipo polo de color azul con rayas horizontales blancas y un pantalón azul oscuro.

De repente, se acercó a él un coche negro de tamaño medio y con el maletero corto, "tipo Renault Megane", según los testigos. Uno de los tres ocupantes comenzó a disparar sobre Paz. Los agentes de la Policía Científica recogieron en el lugar una decena de casquillos que estaban junto al cadáver. Los investigadores tampoco descartan que los asesinos hicieran más disparos, ya que algunas vainas pudieron caer dentro del coche de los asesinos.

El ruido de los disparos alarmó a algunos transeúntes que estaban por la zona con sus perros. Fue el caso de un vecino de Ciudad Lineal que había acudido al pinar próximo a pasear a su pastor alemán, de nombre Virgilio. "He oído una ráfaga de disparos y no le he dado mucha importancia. Cuando volvía al coche, les he visto cómo le estaban disparando", señaló este hombre, que prefirió el anonimato para garantizar su seguridad.

Jesús Manuel Paz cayó malherido, mientras los ocupantes del vehículo seguían disparando. Los médicos que le atendieron hallaron al menos cinco impactos de bala: cuatro le alcanzaron en el tórax y el quinto, en el cuello. En un momento dado, el conductor abrió la puerta del coche, se puso de pie sobre el borde de la carrocería y sacó un arma (supuestamente una pistola) con la que le remató de otro balazo. Acto seguido, se colocó al volante y huyó del lugar a toda velocidad hacia la avenida de los Andes. Allí ya se perdió su rastro. "Ha sido todo tan rápido que no me ha dado tiempo ni a fijarme en la matrícula del coche", añadió el testigo.

Las personas que andaban por la zona avisaron de inmediato a la policía, que desplazó varias unidades. Mientras, la víctima sufrió convulsiones y entró en parada cardiorrespiratoria. Los facultativos de una UVI móvil del Samur-Protección Civil sólo pudieron certificar la muerte, según un portavoz de Emergencias Madrid.

"Cuando nos hemos acercado no hemos visto mucha sangre. Sólo tenía algunas manchas en la camisa. Había gente que estaba avisando por sus teléfonos móviles a la policía", señaló José Luis Herráiz, un vecino de la zona que pasó instantes después del asesinato. El fallecido quedó tirado de lado en el suelo.

Según fuentes policiales, el fallecido, que era pelirrojo y llevaba el pelo corto, tenía antecedentes por tráfico de estupefacientes. La forma en la que fue asesinado apunta hacia un ajuste de cuentas por temas de drogas, según la policía. Los investigadores le encontraron entre la ropa dos teléfonos móviles que no pararon de sonar en toda la tarde. Además portaba unas llaves y 80 euros en efectivo. "Tenían que saber por dónde se movía y le han tenido que esperar porque todo este barrio [el de la Paloma, en Hortaleza] es muy tranquilo y no suele pasar nunca nada", añadieron algunos viandantes.

A algunos testigos les llamó la atención que sobre las seis de la tarde (una hora antes del homicidio) hubiera unos cinco coches estacionados en la calle de las Peonías. Este hecho les sorprendió, ya que esa zona es un inmenso descampado donde no hay aparcamiento. Además dificulta la circulación al resto de vehículos. Justo en ese punto, el desconocido fue acribillado a balazos.