Los silencios del presidente

El largo discurso que el presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps, pronunció el miércoles en su primer debate de política general en las Cortes Valencianas incluyó muchas cifras y porcentajes para referirse a su primer año de gestión al frente del Consell, así como algunas promesas y compromisos nuevos. Pero el presidente obvió algunas cuestiones de las que hizo bandera durante la campaña electoral previa a las elecciones de mayo de 2003, así como otras que anunció en su discurso de investidura del 18 de junio del pasado año y alguna más a la que se ha referido durante su primer ejercicio presidencial.

¿Qué ha sido de La Valldigna? El histórico monasterio cisterciense fue escenario, días antes de las elecciones autonómicas, de un acto en el que Camps hizo profesión de fe valencianista y adquirió una serie de compromisos. Aparte de la recuperación del claustro que se encuentra en Torrelodones -una aspiración que el anterior consejero de Cultura, Esteban González Pons, consideró "la mejor noticia" de la legislatura, pero que se ha visto lastrada por la burocracia-, allí Camps dijo que le gustaría que cada año, alrededor del 1 de julio, se celebrara en el monasterio Santa María de la La Valldigna el aniversario del Estatuto de Autonomía. También propuso crear las fundaciones Renaixença y del Consolat del Mar.

Tampoco se refirió el presidente a la polémica reforma del IVAM, a pesar de que el proyecto de ampliación del museo con una espectacular cubierta metálica ha merecido hace unos días el León de Oro de la Bienal de Arquitectura de Venecia.

Los "proyectos emblemáticos" de la era Zaplana -como el parque temático Terra Mítica de Benidorm y la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia, entre otros- tampoco merecieron mención -sólo, y de pasada, habló del Palau de les Arts-, a pesar de que uno de ellos, el de la Ciudad de la Luz de Alicante, Camps lo hizo suyo en agosto pasado cuando, en medio de la trifulca del PP entre campistas y zaplanistas, el presidente de la Generalitat forzó cambios en la dirección de la sociedad. El parque Mundo Ilusión de Castellón también brilló por su ausencia en el discurso del presidente.

Durante su intervención del miércoles en las Cortes, y a pesar de la retahíla de cifras y porcentajes en los que se apoyó, Camps tampoco consideró necesario hacer mención alguna a la deuda de la Generalitat, la más elevada de España en relación al PIB.

Eso sí, el presidente se refirió a la Copa del América como uno de los proyectos de relevancia internacional, entre los que situó también el de la Esfera Armilar de Valencia.