Dos coches bomba estallan en el principal puerto de Arabia Saudí

Dos coches hicieron ayer explosión con pocas horas de diferencia cerca de bancos con capital saudí y occidental en Yedda, el principal puerto de Arabia Saudí, situado en el oeste del reino. La policía saudí aseguró que al menos una de las explosiones era responsabilidad de delincuentes comunes, pero el hecho de que tuvieran lugar en el tercer aniversario de los atentados del 11-S hizo temer que se tratara de un ataque terrorista y colocó en máxima alerta a las fuerzas de seguridad del país.

Según la versión oficial, la única víctima de las deflagraciones fue el conductor de uno de los coches, que resultó herido leve, y que era buscado por la policía saudí por tráfico de drogas.

La primera explosión tuvo lugar en un taxi aparcado cerca de una sucursal del banco SAMBA. La policía aseguró que se trataba de un asunto de "criminalidad común" y explicó que tres personas estaban implicadas en el intento de robar, con la utilización de explosivos, el dinero de un cajero automático. Según varios testigos el automóvil explotó cuando sus ocupantes acababan de bajar, ante lo cual, los delincuentes emprendieron inmediatamente la huida. En un primer momento se pensó que los autores eran miembros de algún grupo terrorista, ya que la sucursal que presuntamente pretendían atacar forma parte de una compañía participada por capital estadounidense.

Después de cuatro kilómetros de fuga, los sospechosos y se atrincheraron en una casa, situada a unos 300 metros del consulado de Estados Unidos en la ciudad, en un barrio residencial. Los asaltantes fueron rodeados y detenidos poco después por las fuerzas de seguridad.

Cuatro horas después, se produjo una segunda explosión en un coche, sin que se produjesen víctimas. De baja intensidad, la deflagración se produjo ante una sucursal de la British Comercial Bank. Sobre este segundo incidente no se había producido ayer ningún comentario oficial, aunque fuentes de la investigación revelaron que también se trataba de un taxi que había sido robado algunas horas antes de la explosión.

Puerto estratégico

Las explosiones en el estratégico puerto comercial puso en alerta a las fuerzas de seguridad que están viviendo un año especialmente duro en lo que a la lucha antiterrorista se refiere. El último episodio de ésta se remonta al pasado día seis, cuando tres policías murieron en la norteña ciudad de Bureida cuando el vehículo en el que estaban camuflados se incendió al ser alcanzado por los disparos de los presuntos terroristas, aunque otras informaciones apuntan a que se trataba de agentes camuflados que fueron objeto del fuego de otros policías en una confusión.