El PSOE acepta más declaraciones para investigar la "imprevisión" antes del 11-M

Todos los grupos parlamentarios se felicitaron ayer por su decisión unánime de retomar las comparecencias en la comisión del 11-M. Todos se arrogaron el protagonismo por haber evitado "un cierre en falso" a la investigación parlamentaria. El PSOE, como mayoría parlamentaria, anunció que acepta nuevas comparecencias porque ahora hay que investigar la "imprevisión" del anterior Gobierno del PP ante la amenaza islamista. Los grupos minoritarios mantuvieron que su insistencia para evitar "un carpetazo que no iba a entender la opinión pública" fue decisiva. Y el PP reiteró que "nadie le ha hecho ningún caso en todo lo que ha pedido", incluida su pretensión de que "se investigue el autor intelectual".

Paulino Rivero, el presidente de la comisión que investiga los atentados que el 11 de marzo segaron la vida a 191 personas en los trenes de cercanías de Madrid, elogió el acuerdo "unánime" de todos los grupos parlamentarios "para no dar carpetazo a la comisión" como "un ejercicio de responsabilidad". Rivero no habló de que ahora haya que investigar "la imprevisión" del anterior Ejecutivo ante la amenaza islamista, sino que lo dejó abierto a lo que consensúen los grupos, a ser posible "sin vetos".

Los portavoces de todos los grupos minoritarios, que comparecieron juntos en rueda de prensa, se felicitaron porque "la opinión pública y las víctimas no habrían entendido un cierre en falso". Tampoco limitaron a la "imprevisión" del anterior Ejecutivo lo que debe investigarse ahora, sino que defendieron repasar las comparecencias pendientes de todos los grupos, así como si conviene repetir alguna de julio para aclarar dudas.

Los grupos minoritarios defendieron además que la comisión busque "un mecanismo" para recabar aquellas conclusiones que puedan ser pactadas por unanimidad: al menos aquellas que incorporen recomendaciones al Gobierno para intentar evitar en el futuro atentados como el del 11-M. Propusieron que el presidente de la comisión -de Coalición Canaria pero que ha estado al margen de los debates- actúe como "un ponente relator". Es decir, Rivero iría recabando las conclusiones parciales de todos los grupos, analizaría en cuáles es posible el consenso, y ésas se presentarían como un primer bloque. Tales conclusiones unánimes se referirían, en principio, a las propuestas para evitar futuros atentados. Aparte irían las conclusiones "partidarias" que presente cada grupo o pacten entre varios de ellos.

Sin consenso

Esta iniciativa de un "relator" para conclusiones unánimes gustó mucho al PP, pues se parece a una de sus sugerencias de cara al próximo Reglamento del Congreso, pero nada al PSOE. El portavoz socialista, Álvaro Cuesta, recordó que "el actual Reglamento está en vigor" y prevé que las conclusiones de las comisiones de investigación se aprueban por mayoría. Cuesta adelantó que es imposible el acuerdo con el PP: "No va a haber consenso porque quien mintió dice que no mintió y quien tuvo imprevisión dice que fue un campeón en la lucha antiterrorista".

La "imprevisión" del anterior Gobierno del PP ante la amenaza islamista es, según la mayoría socialista, lo que va a investigar ahora la comisión. "Hay que investigar hasta dónde alcanzó el grado de imprevisión" y "quién es el responsable de esa imprevisión", enfatizó Cuesta. Para el portavoz socialista en la comisión, "lo ocurrido entre el 11 y el 14 de marzo ya ha sido exhaustivamente investigado". A la pregunta de si investigar la "imprevisión" equivale a afirmar que el anterior Ejecutivo pudo evitar el mayor atentado cometido en España, Cuesta replicó que es el PP quien está diciendo que se "pudo evitar" y "debe explicarlo". Afirmó que el ex ministro del Interior Ángel Acebes ha "especulado" con esa tesis: "Dicen que pudo haberse evitado y me interesa conocer por qué".

El anuncio de que la "imprevisión" del anterior Gobierno del PP y la "descoordinación" en la información policial eran los motivos que obligaban a retomar las comparecencias fue adelantado, poco antes de que concluyera la reunión de la comisión, por Alfredo Pérez Rubalcaba, portavoz del Grupo Socialista.

Después, el portavoz del PP, Vicente Martínez Pujalte, reiteró la reclamación de su grupo para que se investigue "la autoría intelectual" de los atentados; "de dónde surgieron informaciones falsas como que el PP preparaba un golpe de Estado" por la vía de aprobar un decreto para retrasar las elecciones, y "la vulneración de la jornada de reflexión" con las manifestaciones convocadas por mensajes de móvil ante las sedes del Partido Popular. Pujalte pidió que en esta nueva etapa "no se veten como hasta ahora" todas sus peticiones.

El método para fijar las comparecencias en la Comisión del 11-M será diferente este otoño. En julio, tanto las comparecencias como la documentación a solicitar se pactaba cada semana, con la queja también semanal del PP de que los restantes grupos vetaban todas sus reclamaciones. Ahora todas se acordarán el próximo miércoles, día 15, con la idea de que la comisión continúe recibiendo declaraciones durante uno o dos meses más. Lo hará de forma menos intensiva que en julio, pues sus tareas deben compatibilizarse con el funcionamiento normal del Congreso, es decir, con los Plenos de los martes y miércoles por la tarde y los jueves por la mañana.

La idea, según avanzaron tanto los grupos minoritarios como el PSOE, es que la comisión mantenga sus comparecencias uno o dos meses más. Los grupos minoritarios quieren llamar a declarar a los portavoces de las víctimas, para tener en cuenta sus reclamaciones.