Grecia pierde la magia

La primera jornada europea de participación generalizada en la fase preliminar del Mundial de Alemania tuvo resultados sorprendentes. El primero el de Grecia, que sacó a pasear su nuevo título de campeón de Eruopa y en diez minutos Albania le hizo dos goles de los que no se recuperó. Murati y Aliaj se llaman los poco conocidos goleadores albanos, que dejaron a Grecia paralizada. Acostumbrada a defender y especular, la selección que ganó la Eurocopa de Portugal demostró ayer que de atacar sabe poco. Algo parecido le ocurre a Francia, que ayer no pasó del empate a cero ante Israel en el estadio de Saint Denis. La selección del gallo deberá hacer un esfuerzo tremendo para regenerarse tras la retirada de Zidane, Lizarazu, y Desailly, que ayer vieron el primer partido oficial de su ex equipo por televisión.

Como en el partido que perdió contra Grecia en la Eurocopa, Francia jugó un fútbol equívoco ante Israel. Detrás de una imagen dominante ocultaba un juego inconsistente. En los metros finales decaía. Allí sigue sin funcionar Henry, que fuera del Arsenal parece otro delantero.

Inglaterra se trasladó a Austria para exhibir otra de sus buenas primeras partes que luego se quedan en nada. Al cabo del minuto 64 Lampard y Gerrard habían adelantado a su equipo por 0-2. Austria les terminó empatando y ahí los hinchas ingleses echaron de menos a Wayne Rooney, ausente ayer. Los que sí estuvieron en el campo, aunque sin destacar, fueron los madridistas Beckham y Owen.

La única potencia tradicional que cumplió con su guión fue Italia, que derrotó a 2-1 a Noruega en el primer partido de Marcelo Lippi al frente de la selección, disputado en Palermo. Carew marcó para Noruega.

En el Grupo 7 los rivales de España no demostraron gran cosa. Bélgica empató a un gol con Lituania en Charleroi. Los lituanos empataron con un gol de Jankauskas en el minuto 72. En el otro encuentro del grupo, Serbia no sorprendió a nadie al golear a San Marino.

A Rusia le pesó el luto que vive el país y fue incapaz de empatar con Eslovaquia (1-1) en un partido que fue excepcional por la escasa anotación. Lo normal en la jornada de ayer fue lo que ocurrió en La Valletta, donde el juventino Ibrahimovic se encarnizó con Malta y marcó cuatro goles en la mayor goleada de la tarde: Suecia, 7; Malta, 0. Otra goleada se vio en Basilea, donde Suiza derrotó a Islas Feroe (6-0) por virtud del delantero de origen colombiano Jaan Volanthen hizo tres tantos, dos de ellos en los primeros diez minutos. Volanthen inscribió su nombre en la lista de récords de la última Eurocopa al convertirse, con 18 años, en el más joven de la historia en marcar en este torneo.

Finlandia no desaprovechó la ocasión de sumar tres puntos y se impuso a Andorra (3-0) en Tampere. Irlanda respondió a su afición con el mismo marcador y derrotó a Chipre (3-0) en Dublín. En otra isla del Atlántico los búlgaros que viajaron a Reijkavik no tuvieron inconvenientes para golear a Islandia (1-3). No pudo hacer lo mismo Turquía, incapaz de ejercer de local ante Georgia (1-1).