Una comedia retrata en el Euskalduna la crueldad de las relaciones laborales
Cuatro actores compiten por un trabajo en 'El método Grönholm'
La crueldad en las relaciones laborales, y concretamente en la selección de personal de una empresa, marcan la comedia El método Grönholm, que se estrena hoy en el Palacio Euskalduna de Bilbao y estará en cartel hasta el próximo 12 de septiembre. La obra, "divertida y rápida, llena de sorpresas", juega a confundir al espectador, según indicó ayer su directora, Tamzin Towsend.
Los cuatro últimos candidatos a una plaza de ejecutivo en una importante multinacional se reúnen para pasar las últimas pruebas de selección, unas pruebas que, rayando en lo absurdo, nada parecen tener que ver con el trabajo en sí. Carlos Hipólito, Cristina Marcos, Jorge Roelas y Jorge Bosch interpretan a esos cuatro ejecutivos, unos "tiburones", según ellos mismos los describieron ayer en la presentación de la obra en Bilbao.
"Cada uno está dispuesto a hacer lo que sea por conseguir ese trabajo", comentó Towsend. De ahí surgen las situaciones de comicidad, porque El método Grönholm es una comedia de principio a fin, irónica, cruel y llena de sorpresas. Su directora e intérpretes confían en ese efecto sorpresa e, incluso, piden a quienes vayan a verla que no desvelen el final a los futuros espectadores.
Jorge Galcerán, autor de la obra, se basó en un hecho real para escribirla. En una papelera de Barcelona se encontraron unos documentos en los que un empleado del departamento de personal de una cadena de supermercados había anotado sus impresiones negativas -"gorda", "gitana" o "fea", por ejemplo- sobre las candidatas a un puesto de cajera.
"Es un verdadero placer poder estrenar a autores españoles vivos, que constituyen la renovación de la dramaturgia europea. No es frecuente tampoco encontrarse con textos como éste que conecten totalmente con el público", indicó Carlos Hipólito, que interpreta su segunda obra de Galcerán.
Ni directora ni intérpretes dudan que el público se divertirá "muchísimo", pero añaden que también saldrán del teatro con ganas de debate. "El método Grönholm tiene un componente de suspense y un componente permanente de comedia, pero no es banal en ningún momento", explicó Hipólito. El actor incidió en la "cercanía" de lo narrado: "¿Quién no ha conocido a un trepa? ¿Quién no ha tenido un jefe que le puteara?"
[Cerca de 20.000 espectadores han visto hasta la fecha la obra Mamá, quiero ser famoso, que se representa en el Arriaga de Bilbao desde el 13 de agosto y que se prolongará hasta el 5 de septiembre, según informó el teatro en una nota].
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