Un informe señala que unos bares de copas sobrepasan el nivel de ruido permitido cerca del hospital de Móstoles

Los alrededores del hospital de Móstoles (200.000 habitantes) sobrepasan por la noche el límite de decibelios permitido a causa de una zona de bares de copas que hay cercana, según un estudio de impacto medioambiental elaborado por el Gobierno regional sobre el tren ligero que unirá en 2007 la localidad de Móstoles con la de Navalcarnero.

"Conviene destacar, por su importancia como punto singular, los niveles nocturnos

encontrados en la zona del hospital", reza el informe, que añade que la principal fuente de ruido del municipio es el tráfico.

La zona hospitalaria, según el artículo 8 de la ordenanza municipal de prevención del ruido, estaría catalogada como tipo I. Esto significa que los niveles de ruido no pueden superar los 40 decibelios y, según el informe regional, se detectaron niveles superiores a 55. "Dicho nivel de ruidos es consecuencia del tráfico generado por la concentración de bares en torno al hospital", concluye el informe medioambiental.

Cerca del centro hospitalario hay una zona de bares de copas, situada justo detrás de un centro comercial. Los bares se sitúan alrededor de una plaza, donde a veces quedan restos de botellón. "Esta zona de bares de copas está próxima a la cafetería y a la zona de administración del hospital. Las habitaciones están más retiradas y no sufren ningún problema de ruido", señalaron fuentes hospitalarias, que añadieron que ningún paciente se ha quejado por este asunto.

El hospital de Móstoles está en el centro de la localidad, y cerca, además, de varios colegios.

En 1997, cuando el PSOE gobernaba en Móstoles, fue aprobado un acuerdo que impedía la apertura de más locales de ocio en los barrios del hospital, de La Princesa y de Estoril.

Los vecinos de estas zonas se habían quejado reiteradamente de los problemas que ocasionaban los bares de copas. En febrero de este año, el acuerdo fue revocado durante un mes por el PP (ahora en el gobierno municipal), ya que carecía de rango normativo. Para solucionar el fallo, el pleno tuvo que hacer una modificación puntual de las normas urbanísticas.