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El noveno festival de música antigua de Peñíscola se clausura con una asistencia del 85% del aforo

Roma, Brescia y Cremona, Venecia y Milán son algunos de los puntos de la geografía musical italiana del siglo XIII que recorrerá hoy el ensemble la Tempesta, concierto que culminará el IX Festival de Música Antigua y Barroca de Peñíscola. El patio de armas del castillo del Papa Luna ha acogido, desde el pasado día 4, la novena edición de un festival que este año se ha centrado, salvo en dos interpretaciones, en el periodo barroco, en contraste con ediciones anteriores, donde el festival había puesto el acento en la época renacentista. Según la directora del Instituto Valenciano de la Música (IVM), Inmaculada Tomás, los conciertos han cubierto, de media, cerca del 85% del aforo del patio a excepción del lunes, día en el que la Orquesta Barroca de Friburgo, con los Conciertos de Brandenburgo en el programa, obligó a ampliar el auditorio debido a la gran expectación creada. Tomás destacó ayer, además, el alto nivel técnico y musical de todos los intérpretes de esta edición con un tipo de música que, aunque muy especializada, según explicó, "no es difícil de escuchar".

El festival Internacional de Música Antigua y Barroca se celebra en Peñíscola desde 1996. Según el alcalde del municipio, Andrés Martínez, supone un complemento perfecto a la oferta turística ya que "el modelo sol y playa está como todos sabemos". Uno de los principales objetivos del festival es la recuperación y revitalización de repertorios de siete siglos, entre el XII y el XVIII, especialmente de música española, que se encuentran al margen de los circuitos habituales. El acto que concentró a un mayor número de público fue el castillo piromusical con el que se inauguró esta novena edición. Según fuentes de la Policía Local, alrededor de 300.000 personas participaron del espectáculo, disparado por la pirotecnia Tomás de Benicarló, en la playa norte de Peñíscola.

Sin embargo, uno de los conciertos que levantó mayor expectación fue el de la Capella de Ministrers y el Cor de la Generalitat, que interpretaron un repertorio de la música de Benedicto XIII, más conocido como el Papa Luna. El público abarrotó el recinto del concierto que, aunque inicialmente se programó para el patio de armas del castillo, finalmente, hubo de celebrarse en la Iglesia del Socorro, donde Benedicto XIII ofició misas pontificales en algunas festividades solemnes de Peñíscola en el siglo XIV. El programa, producto de un trabajo de investigación y recuperación de las partituras, será grabado a partir de enero.

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