"La empresa es también responsable"
Antonio Rodrigo Torrijos (Sevilla, 1950) estrena cargo como concejal de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Sevilla y vive también su primera "crisis política". Los desalojos de Los Bermejales le han dejado sin vacaciones, un viaje a Francia, aunque sigue confiando en su socio de gobierno, el partido socialista.
Pregunta. ¿Qué le parece la comisión de investigación?
Respuesta. Estoy satisfecho por la decisión del alcalde, porque, desde el comienzo, IU ha venido reclamando la máxima transparencia en este affaire.
P. ¿IU ha presionado para que se abriese una comisión de investigación?
R. IU lo ha defendido desde el principio y ha dejado constancia pública de que no teníamos conocimiento ni de la forma ni de las circunstancias en que se produjo el desalojo de los chabolistas de los Bermejales. Como recoge el propio decreto, el alcalde decidió constituir una comisión de investigación, especialmente por el papel de IU. Y yo no quiero resaltar si es consecuencia de nuestro peso, lo que quiero resaltar es que se ha producido y que nos parece positivo.
"Tengo que reconocer que se ha generado una crisis de confianza y municipal"
P. ¿En el caso hipotético de que se hubiese producido un pleno para pedir una comisión de investigación, IU que hubiese votado?
R. La comisión de investigación se ha conseguido y lo otro es una hipótesis. Nosotros, desde el 28 de julio hemos pedido transparencia. Y si en un pleno no la hubiésemos conseguido, no hubiéramos dudado en pedir una comisión. Aunque nuestra intención no es ridiculizar a nadie, exigimos transparencia.
P. ¿Que se puede hacer con las familias que están en el Polígono Sur?
R. Les he pedido tanto al alcalde en funciones, Emilio Carrillo, como al alcalde real, Sánchez Monteseirín, que aquello que se había prometido debe cumplirse.
P. ¿Se puede perseguir jurídicamente a estas familias instaladas en el Polígono Sur por incumplir el contrato que han firmado?
R. Por mi propia trayectoria, el término perseguir no me gusta nada, y menos a los más débiles. Lo que hay que garantizar es una estrategia y utilizar las herramientas jurídicas, pero de manera paralela al instrumento social necesario que permita que los desalojados tengan una ubicación física en otra zona.
P. ¿Qué piensa de las reacciones vecinales en diferentes partes de la ciudad al conocer que cerca podían realojarse los chabolistas de Los Bermejales?
R. En el polígono nunca se ha expresado una reacción de rechazo per sé de los vecinos a la ubicación de personas allí. El problema es que, si se hace de manera descontrolada y ubicando a todas las personas en el mismo espacio, se produce una estrategia de gueto. Cierto es, seríamos también cínicos sino lo reconociéramos, que existe a priori unas posiciones de cierto rechazo social a que en la zona donde uno vive se introduzcan personas derivadas de las chabolas. Eso también hay que superarlo.
P. ¿Le ha sorprendido la medida del partido socialista?
R. Sí , la verdad es que nosotros no teníamos conocimiento. Cuando lo tuvimos rechazamos la forma, el método y el fondo. Se ha generado, y tengo que reconocerlo, una crisis de confianza y una crisis municipal. Espero que nunca más se tomen medidas de forma unilateral, que ésta sea la excepción de la norma. Si no es así, estaremos en una crisis de mayor calado. El hecho de que el PSOE haya reconocido el error nos parece saludable.
P. ¿Qué le parece que el alcalde no haya aparecido públicamente?
R. Yo mismo, Antonio Rodrigo Torrijos, he estado presente desde el primer momento tras enterarme por los vecinos. Estuve al frente de mis responsabilidades con acierto o no, eso ya se valorará. Esa pregunta tiene que contestarla el alcalde.
P. ¿Con 40.000 euros se puede comprar una casa en Sevilla?
R. Desde el punto de vista del mercado inmobiliario, sí. El problema de Los Bermejales es que había que haber garantizado la ocupación previa de los chabolitas y haber comprometido la ayuda. Sabiendo como sabemos que la cultura en estas personas no es la de ubicarse en un espacio urbano como el resto de los ciudadanos, darles dinero en mano daba lugar a lo que ha sucedido. Era previsible, aunque cierto es que en Sevilla hay nueve, diez u once zonas donde se puede obtener una vivienda. Y eso hace más dura la decisión que se adoptó.
P. ¿Hay que pedir responsabilidades a la empresa Inmoavance?
R. Ya veremos lo que sucede con la comisión, pero yo creo que una de las líneas es pedir también responsabilidades a la empresa. Y cuando digo también no digo exclusivamente. La empresa estaba comprometida al desalojo y realojo. Lo primero lo hizo con rapidez y limpiamente y lo segundo está en la más oscura penumbra.
P. ¿Qué le ha parecido la actuación de la oposición?
R. Ha hecho algo contradictorio. Se negó a recibir la información en el momento que se le iba a ofrecer alegando que el alcalde no estaba. Muestra que para ellos su prevalencia no es el esclarecimiento de los hechos sino darle caña al gobierno. Si hubiesen asistido a la Junta de Portavoces tendrían toda la información que el PSOE quería dar.
P. ¿Saca algo positivo de esta crisis?
R. Hay que ser un tanto masoca, pero como positivo tiene que se ha producido un amplísimo consenso social respecto a que estos métodos de actuación son rechazados por la inmensa mayoría de la ciudadanía.
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