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Reportaje:

Castizo y multiétnico

Lavapiés despide a San Cayetano con fiestas y giras de integración para inmigrantes

Con música, misa y procesión terminaron ayer las fiestas de San Cayetano. Limonadas y chotis, conciertos y flamenco han llenado de alegría durante tres días el que antes era el barrio más castizo de Madrid: Lavapiés.

En la actualidad, esta zona se caracteriza por la mezcla de razas y culturas debido a los numerosos inmigrantes que no sólo residen aquí, sino que han establecido sus negocios: almacenes, tiendas, bares, restaurantes... que lo convierten en el barrio multiétnico por excelencia de la capital. Por ello, este año las fiestas de San Cayetano, San Lorenzo (día 10) y la Virgen de la Paloma (día 15) incluyen en su programación visitas guiadas para enseñar a los inmigrantes las tradiciones vinculadas a estas festividades del barrio de Lavapiés y sus alrededores.

Las visitas guiadas parten de la Ribera de Curtidores, a la altura del número 3. Esta iniciativa, organizada por la Federación de Mujeres Progresistas y Paideia, en colaboración con la Junta Municipal de Centro, está dirigida a fomentar la integración cultural. Comenzaron ayer y se repetirán el martes, 10, y el domingo, 15, a las 19.00.

Ayer comenzaron también las fiestas de San Lorenzo de El Escorial y de Leganés, a las que se unirán otras localidades de la región a lo largo de esta semana, entre ellas Chinchón.

Dos niños paseaban ayer los castizos trajes típicos de las fiestas de La Paloma y San Cayetano.
Dos niños paseaban ayer los castizos trajes típicos de las fiestas de La Paloma y San Cayetano.RICARDO GUTIÉRREZ
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