El Gobierno adjudica a Alstom la construcción de 70 trenes ligeros

La Comunidad de Madrid ha adjudicado a la empresa Alstom Transporte, SA el contrato para la construcción de los primeros 70 trenes ligeros por un total de 144,6 millones de euros, y que recorrerán las futuras líneas que darán servicio a los municipios de Pozuelo, Boadilla del Monte y Navalcarnero, así como a los nuevos desarrollos urbanísticos del norte de la capital. Las obras comenzarán en octubre.

El consejero de Transportes e Infraestructuras, Francisco Granados, anunció ayer esta compra, que se une a la obtención de los permisos medioambientales favorables del conocido como metro-oeste y el metro ligero a los nuevos barrios de Las Tablas y Sanchinarro.

Según el consejero, "ambas noticias permitirán hacer realidad la puesta en marcha de un nuevo medio de transporte que dará cobertura a importantes zonas de la región en crecimiento antes de 2007".

La primera unidad de los nuevos trenes ligeros estará lista en 19 meses, y el resto se entregará de forma paulatina para ponerse en funcionamiento antes de junio de 2007.

Los nuevos trenes, pertenecientes al modelo Citadis, permiten una velocidad máxima de circulación de 70 kilómetros por hora y tienen capacidad para 372 viajeros. Su longitud es de 23 metros y su anchura de 2,4 metros, además de poseer modernos sistemas de seguridad.

"Además", añadió Granados, "existen ya 540 vehículos con estas características circulando por 15 ciudades de todo el mundo, y esta experiencia nos ha demostrado que su flexibilidad permite llegar a más zonas que el suburbano y construir un mayor número de estaciones, cubriendo una mayor área de población".

Este tipo de transporte utiliza la electricidad como fuente de energía, de larga vida útil y de fácil accesibilidad y comodidad para el viajero, y cuenta con las últimas tecnologías en materia de transporte, como la comunicación directa de radiotelefonía con el puesto de control y con los propios pasajeros a través de megafonía, según informó la Consejería.

Los primeros vecinos que contarán con este nuevo transporte serán los habitantes de Pozuelo, Boadilla del Monte y los nuevos barrios de Las Tablas y Sanchinarro, cuyos proyectos ya han obtenido el visto bueno de Medioambiente, lo que permitirá licitar las obras este mes y comenzar los trabajos en octubre.

Metro-oeste acercará la red metropolitana a Pozuelo de Alarcón y Boadilla del Monte a través de dos nuevas líneas en superficie con más de treinta paradas, y partirán desde la estación de Colonia Jardín, donde se construirá un nueva estación que conecte con la línea 10 del suburbano.

La línea a los nuevos barrios del norte de la capital permitirá conectar Las Tablas y Sanchinarro con la plaza de Castilla en 15 minutos, con un total de 10 estaciones.