El ministro del Interior afirma que se debe afrontar la lucha antiterrorista "sin miedo y sin ceder al chantaje"

El ministro del Interior, José Antonio Alonso, está convencido de que la batalla contra el terror hay que afrontarla "siempre sin miedo" y sin ceder "nunca al chantaje de los terroristas", que no deben "tener voz ni voto" en las sociedades democráticas. En una entrevista con la agencia Efe, el titular de Interior asegura que las fuerzas de seguridad, en esa "ardua" tarea, están en "máxima alerta" y "sin bajar la guardia" ante el riesgo del terrorismo internacional de raíz islamista y también ante el de ETA. En sus declaraciones, Alonso afirma que la actual relación con EE UU en materia de seguridad es "muy buena", espera que la comisión del 11-M "sea útil" y confía en que no haya afectado a la imagen de las fuerzas de seguridad, a las que aprovecha para enviar un mensaje de "ánimo y apoyo absoluto".

El ministro muestra su confianza en "localizar y detener" a todos los implicados en el 11-M, "incluidos los que pueden estar relacionados con ramificaciones internacionales". Insiste Alonso en que "todos los indicios y datos objetivos" de la investigación conducen a la autoría del terrorismo de base islamista "y ninguno a otra". En el caso de ETA, "debemos tener claro que si no atenta es porque no puede" y "cualquier otra consideración sería debilitante en la lucha contra ella", añade el ministro. "No hay que bajar ni lo más mínimo la guardia y hay que estar absolutamente atentos y alertas ante su amenaza", "también actuando en el entorno presionando con los mecanismos legales del Estado de derecho", recalca.

No cree Alonso que haya que hacer consideraciones de cómo pueden responder los terroristas a decisiones del Gobierno en política internacional, como el envío de tropas a Afganistán o la retirada de Irak, pues con ello se entraría "en ese chantaje que la sociedad democrática tiene que rechazar de plano". "Los terroristas nunca pueden tener ningún tipo de voz ni voto en las tareas que hacen los Gobiernos democráticos".

De sus poco más de 100 días en el Gobierno destaca la creación del Centro Nacional de Coordinación Antiterrorista, que supone "un valor añadido dentro de los servicios de información e inteligencia del Estado", y la incorporación para el próximo otoño de 150 nuevos policías y otros tantos guardias civiles que triplicarán los actuales efectivos contra el terrorismo islamista.