El juez Manzanares regresa a la judicatura tras el indulto del PP
El magistrado ocupará el Juzgado de Instrucción número 2 de Sabadell
El juez prevaricador José Ramón Manzanares regresa a la carrera judicial y será el titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Sabadell. Es decir, instruirá procesos penales y decidirá sobre la situación de libertad o prisión de los detenidos o imputados que pasen a su disposición. El Tribunal Supremo expulsó a Manzanares de la judicatura, pero el último Consejo de Ministros que presidió José María Aznar, el pasado 1 de abril, lo indultó.
Manzanares fue condenado en 2001 por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) a dos años y medio de inhabilitación especial "con pérdida definitiva del cargo de juez" por un delito de prevaricación continuada cometido cuando, siendo juez de vigilancia penitenciaria, retrasó de manera maliciosa los permisos navideños de los presos de Quatre Camins en 1998. La fiscalía de Cataluña, que reclamó en el juicio 15 años de inhabilitación, anunció el recurso y lo preparó, pero el entonces fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, lo paralizó.
Por el contrario, la defensa ejercida por el abogado Cristóbal Martell sí recurrió, aunque el Tribunal Supremo no sólo confirmó la pena en enero de 2003 sino que insinuó que la hubiese podido incrementar si la acusación pública hubiese recurrido. En cualquier caso, Manzanares acabó pidiendo el indulto apoyándose en que la sentencia del TSJC ya reclamaba la medida de gracia. El juez fue indultado por el último Consejo de Ministros que presidió Aznar, el 1 de abril, y estando el Gobierno en funciones "a condición de que no cometa delito doloso durante el tiempo de tres años".
Tras el indulto, el pleno del Consejo General del Poder Judicial del pasado 7 de julio consideró que Manzanares ya había liquidado la condena con fecha del 27 de febrero, y lo comunicó al Ministerio de Justicia para que pudiese percibir los atrasos de su salario. Hasta esa fecha, había cobrado el 75% de las retribuciones básicas.
Liquidada la condena e indultado por el Gobierno, Manzanares podría haber regresado al Juzgado de Primera Instancia número 37 de Barcelona que dejó. Pero optó por un destino más comprometido y la comisión permanente del Poder Judicial le otorgó la del Juzgado de Instrucción número 2 de Sabadell, a la que había optado por concurso. El pleno del Consejo General del Poder Judicial debía ratificar ese acuerdo al día siguiente, y fue en esa reunión donde volvió a aflorar la frontal oposición que Manzanares provoca en los sectores progresistas de la judicatura.
El vicepresidente del Poder Judicial, Fernando Salinas, y el vocal Félix Pantoja plantearon que, ante la previsión que se hace en determinados casos en la Ley Orgánica del Poder Judicial, se sometiera a Manzanares al examen de un forense para que certificase que se encontraba en plenitud de facultades psíquicas para ponerse la toga. Del mismo modo, ambos vocales cuestionaron la legalidad del reingreso de Manzanares a la carrera judicial con el argumento de que si bien había liquidado la condena, no sucedía lo mismo con los antecedentes penales, que no se consideran extinguidos hasta al cabo de un tiempo
Pero ninguno de esos razonamientos fue acogido por la mayoría conservadora del Poder Judicial, algunos de cuyos vocales se mostraron escandalizados porque se plantease la posibilidad de someter a Manzanares a una revisión psíquica. La petición se basaba en la sentencia condenatoria, en la que se considera probado que Manzanares podría haber resuelto sobre los permisos navideños de los presos con los informes que tenía, pero optó por dictar hasta 700 providencias reclamando documentación que la sentencia califica de "innecesaria". Eso, dijo el tribunal, es "retardo malicioso" en la tramitación de las causas.
Esperar tres años
El vocal del Poder Judicial Alfons López Tena planteó también sus dudas sobre el reingreso del juez porque entiende que si el Gobierno lo indultó a cambio de que no delinquiese durante tres años se trata de una condición suspensiva y debería dejarse pasar ese tiempo.
José Ramon Manzanares Codesal fue funcionario de prisiones antes de ejercer de juez de vigilancia penitenciaria entre 1991 y 1996. Es hijo del consejero de Estado y ex vicepresidente del Consejo General del Poder Judicial José Luis Manzanares Samaniego. El suyo fue el segundo indulto que concedió el Gobierno del PP a un juez condenado por prevaricación. El primero fue para Javier Gómez de Liaño, quien, a diferencia de Manzanares, optó por no regresar a la carrera judicial tras la condena por el caso Sogecable.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.