La cumbre entre Maragall y Matas cierra heridas
La normalidad se ha instalado en las relaciones entre el Gobierno del popular Jaume Matas y el Ejecutivo que preside Pasqual Maragall. Las viejas heridas abiertas a raíz de la polémica por el Institut Ramon Llull, que acabó en ruptura, están cauterizadas, a juzgar por la amplia reunión de una veintena de consejeros de ambas comunidades que ayer se celebró en el Palau de Generalitat, en una inusual -por numerosa- cumbre autonómica. Matas anticipó el apoyo de Baleares al proyecto de la eurorregión que propugna Maragall y postuló tesis cercanas a las catalanas en el asunto de la financiación autonómica. Ambas comunidades buscarán fórmulas de cooperación en inmigración. Maragall y Matas subrayaron que tienen "especial interés" en la nueva etapa.